LA GACETA SALTA
Pidieron prisión perpetua en el primer juicio donde se aplica el agravante del femicidio
Hoy se desarrolló la primer audiencia en una causa que podría sentar un precedente en delitos de género.
22 Sep 2014
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MAGISTRADO. El juez Abel Fleming. FOTO ARCHIVO LA GACETA / ANTONIO FERRONI
Hoy a las nueve comenzó en la Sala III del Tribunal de Juicio la audiencia de debate contra Héctor Ramón Ávila (46), acusado por los delitos de homicidio agravado por el vínculo y por la relación con la víctima, en concurso real con el delito de amenaza con arma y tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil, en perjuicio de su ex pareja Norma Argentina Ledesma.
Es la primera vez que se aplique en un juicio en Salta el agravante previsto en el artículo 80, inciso 1º, de la ley 26791, que incorpora los delitos de género al Código Penal.
En el primer día de audiencia se conoció que la fiscalía había solicitado la pena de prisión perpetua para Ávila, quién hizo uso de su derecho a no declarar.
El tribunal escuchará hoy los testimonios de las testigos Rosa Mabel Ledesma (hermana de la víctima y testigo presencial del hecho), Noemí Graciela Brizuela (vecina de la víctima) y Olga Sorarie.
El tribunal está presidido por el juez Alberto Fleming, Javier Armiñana y Pablo Farah son los vocales. La defensa está a cargo de René Gómez. La fiscal interviniente es Graciela Herrera de Gudiño. Está previsto que el juicio culmine el jueves 25 de septiembre.
El caso
Ávila está acusado de haberle efectuado un disparo en el pecho a su ex pareja, Norma Argentina Ledesma, el 30 de diciembre de 2012, provocando su deceso. Según consta en el expediente de la causa, ese día ambos se encontraban en el domicilio de la mujer, en el barrio San Cayetano de la localidad de El Bordo.
Luego de dispararle a quemarropa, el imputado se marchó de la vivienda de la víctima. Poco después fue detenido por la policía en su domicilio, donde se secuestró un arma de fuego calibre 22 y un cartucho del mismo calibre que coincidía con el encontrado en la escena del crimen.
Se sabe que Ávila y Ledesma ya no convivían y el imputado, incluso, tenía una nueva pareja, pero habían retomado el diálogo a raíz del fallecimiento de un hijo. En el expediente se deja constancia de las escenas de celos y amenazas de Ávila hacia su ex mujer.
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