La fotografía de casamiento como empresa

Leonardo de la Vega dirige desde hace cuatro años la asociación de fotógrafos de bodas de la Argentina “Wedding Photojournalist Argentina”, WPJAR, algo así como una franquicia de una organización que agrupa a los fotógrafos de esta especialidad de todo el mundo y, en este caso, del país. Trabajó desde chico en el rubro, en su San Juan natal. “Desde los 16 años y sigo haciendo de todo: productos, moda, pero me especialicé en casamientos y es lo que más hago”, cuenta a LA GACETA.

De la Vega, vivió el proceso de jerarquización de los fotógrafos sociales. En un principio a aquellos que tomaban fotografías de eventos los mismos fotógrafos no los tomaban en serio, creyendo que su trabajo era menor. “De repente, empecé a seguir lo que hacían fotógrafos que tenían prestigio en cubrir casamientos y cambié mi visión. Así llega la WPJAR, una asociación que tiene por objetivo agrupar a los fotógrafos de bodas en un sitio que nos identifique, en donde los clientes puedan ver quiénes son los mejores fotógrafos de su provincia y pueda contactarse con ellos, explica mientras comenta que están estrenando sitio web. “Los premios que entrega la asociación tienen que ver con el prestigio. Son varias convocatorias al año que suman puntos, mientras más fotos ganadoras tengas, mayor será tu puntaje. A fin de año se elige en base a esos números al mejor fotógrafo del país”, relata mientras comenta que para esta primera convocatoria llegaron cerca de 900 fotografías y quedaron seleccionadas 200.

De esas fotografías seleccionadas, algunas pertenecen a fotógrafos salteños que se dedican a plasmar estos momentos. 

¿Por qué quisieron formar parte de esta asociación?

Lucía Ramos: Creo que para poder sentirme parte de los fotógrafos de boda de Argentina tenía que compartir con ellos en un mismo lugar, así que decidí un día sumarme a la WPJAR. Hace dos años soy parte de la asociación aunque recién ahora me animé a mandar algunas fotos al primer concurso del año, sin mucha expectativa, pero ahora muy feliz y agradecida por el resultado.

Matías Fernández: Muchos de los fotógrafos que admiro a nivel provincial y nacional están en esa asociación, yo recién estoy por cumplir cuatro años de oficio, y ahora me tengo más confianza. Viendo las fotos de los colegas, la calidad de imagen, pensé que estaba casi en un nivel similar y me gustó la idea de que algún fotógrafo internacional califique nuestro trabajo.

Elena Alonso: WPJAR era su momento el único sitio dedicado exclusivamente a fotógrafos de bodas de toda la Argentina. Me parecía interesante formar parte de un grupo a nivel nacional, figurar en las búsquedas como representante de nuestra provincia y participar en los concursos de igual a igual, sin importar las distancias y diferencias de cada región. Los demás colegas salteños se fueron animando y entre todos pudimos crecer y poner a Salta en el mapa de la fotografía de bodas.

¿Cuál es la importancia de un fotógrafo en una boda?

Lucía Ramos: Una boda, sin dudas, es uno de los momentos más importantes de la vida de las personas y como tal merece tener un registro para ser recordado por siempre. Entonces en este aspecto el fotógrafo juega un rol fundamental, el dejar registrado un día único e irrepetible. Tiene la responsabilidad de guardar en imágenes cada valioso instante de aquel día tan preciado de dos personas, de dejar plasmada la emoción, las lágrimas, las sonrisas y todo eso que pasa tan rápido en una noche para poder revivirlo con el pasar de los años en cada fotografía. Los novios que piensan en contratar un fotógrafo para su boda sin dudas saben del valor de los recuerdos y quieren guardarlos a lo largo del tiempo. Así mismo, creo que hay un fotógrafo para cada pareja y que nos contactan para formar parte de su historia porque vieron algo en nuestra mirada que los identifica y se sienten cómodos con nuestro trabajo.

Matías Fernández: Lo que queda es el recuerdo y las fotos. Hay gente que invierte y otros que lo ven como gasto, pero está bueno que elijan un fotógrafo que se adapte a sus gustos y no a su bolsillo. Yo tengo el placer de que me elijan por mi trabajo, cada fotógrafo tiene su estilo.

Elena Alonso: Los fotógrafos de bodas somos los responsables de crear los recuerdos de uno de los días más importantes en la vida de esa familia que está arrancando. Tenemos la fortuna de vivir en una época donde se está valorando nuestro trabajo como nunca antes. Los novios llegan a elegir a su fotógrafo antes de tener una fecha fija o salón confirmado, es importante para ellos y te lo hacen sentir así. Yo me siento realmente honrada de que se me confíe semejante tarea.

En este contexto económico de inflación que se vive en Argentina hoy ¿cómo es trabajar en el rubro?

Matías Fernández: Es difícil, pero las parejas que vienen planificando su casamiento hace tiempo ya fueron congelando precios y pagando los gastos. Se pone un poco difícil en este contexto, pero las parejas son previsoras y guardan el dinero para esta inversión.

Lucía Ramos: Con respecto a la inflación creo que no hay rubro que no se vea afectado por esta problemática y nosotros claramente no somos la excepción. Está difícil para todos y hay que darle para adelante. Aunque en nuestra profesión es muy costoso adquirir y mantener los equipos, como así también capacitarse requiere de mucha inversión, hay que apostar a que en un tiempo no muy lejano las cosas mejorarán.

Elena Alonso: Vivimos épocas complicadas en lo económico y para los novios es un esfuerzo muy grande solventar sus casamientos. Las familias y amigos colaboran y en la mayoría de los casos se hace todo a pulmón. Por un lado es algo que los une, porque sé que hay miles de momentos antes de ese gran día, que comparten mucho más que el día de la boda en sí y que todos aportan su granito de arena para que la celebración salga según lo deseado, eso es algo hermoso. Por otro lado la situación hace que yo valore aún más el esfuerzo que hacen para incluirme ese día, podrían elegir a cualquiera, pero eligen mi mirada, y para mí, es un regalo que me hacen. Es una realidad que disminuyó el trabajo para muchos, es por eso que agradezco todos los días y cada vez que puedo a las personas que hacen posible que viva de esto. Todavía no puedo creer tantas bendiciones y pongo todo de mí cada vez que tengo una cámara en mis manos, es la única y humilde forma en la que puedo devolver tanto.

¿Cuál es la clave para capturar los momentos en un casamiento y transmitir esa empatía en las imágenes?

Matías Fernández: La clave para hacer esto es generar empatía y confianza con las parejas. Generalmente me reúno más de una vez con ellos, hacemos las fotos de la pre boda, y veo que se acostumbren a que uno estará encima de ellos para que las fotografías sean lo más natural posible. La clave para mi es la capacitación, invertir todo lo que puede en capacitación, ya que hay siempre gente que te puede dar una mirada perfeccionada de tu trabajo.

Lucía Ramos: Lo hermoso de los casamientos es que cada uno es muy distinto a otro. Cada pareja de novios tiene su historia, sus particularidades y está en el fotógrafo saber observar cada detalle y así poder mostrarlo en imágenes. Lo que me apasiona de las bodas es poder ser parte de ese amor y vivirlo de cerca, poder crear ese estrecho vínculo de confianza con los novios que me permite tener la libertad de contar con mi mirada una historia que luego va a ser el preciado recuerdo de toda una familia.

Elena Alonso: La verdad que no se si hay una clave, yo fotografío como me nace, siempre fue así. Intento ser fiel a lo que está sucediendo delante de mi cámara y sobre todo ser muy sincera conmigo misma. Creo que siendo yo misma es la única forma en la que puedo ser original y única, ya que no existen dos miradas iguales. Aprendí con el tiempo a llegar a los eventos sin expectativas, dejando que todo me sorprenda y estando atenta a las cosas que hacen único a cada casamiento. Las personas, reacciones, gestos, miradas… ellos son los protagonistas, yo simplemente estoy ahí para hacer clic.