Cruces, millones de pesos y desmentidas en el juicio por Trogliero

Si bien el homicidio de Javier Trogliero Álvarez a manos de Juan Carlos Gómez Paz luego de una reunión de amigos en la casa de Mario Del Barco en barrio el Huayco en 2013 no difiere, en su forma, a los muchos que lamentablemente suceden en los barrios de Salta, el interés de la opinión pública y los propios acontecimientos tanto durante la cuestionada instrucción como durante el debate oral comenzado el martes, ya lo han transformado en un juicio de los que quedará en la memoria colectiva.

La etapa instructoria a cargo del juez Esteban Dubois y el trabajo de la policía y del CIF durante la investigación fue duramente cuestionada tanto por la querella como por los abogados defensores, quienes llegaron a pedir la nulidad de todo lo actuado, lo que fue rechazado por el Tribunal de Juicio.

Una millonaria indemnización

Ya en momentos de declaraciones testimoniales, en la primera audiencia se presentó Sonia Álvarez, la madre de la víctima, quien exigió justicia para su hijo.

El abogado de Mario Del Barco -imputado por encubrimiento agravado-, Javier Latorre, le hizo una pregunta que sorprendió e incomodó a Sonia. Le preguntó por qué había pedido una indemnización civil de tres millones de pesos a los imputados. “No sé nada, me acabo de enterar de eso”, fue la respuesta de la madre de la víctima, con gesto de sorpresa.

Latorre le confirmó a LA GACETA que en el expediente consta una demanda civil por 2.800.000 de pesos en concepto de que Javier Trogliero era el sostén de la familia y fuente de ingresos. Según el abogado, esto no era real debido a que no vivía con su familia sino con su abuela hacía muchos años y que la pareja de Sonia le había dado trabajo, acorde a lo declarado por la propia madre de la víctima.

Desde el entorno de la familia Trogliero comentaron que realmente Sonia desconocía la presentación, que está llevando adelante el abogado Washington Álvarez, familiar de la víctima y que simplemente no les había informado del monto.

Latorre dijo que fue amenazado por el hermano de la víctima

Al volver de uno de los cuartos intermedios en la audiencia del miércoles, Javier Latorre pidió la palabra y dijo que luego de saludar a los abogados querellantes, la persona que estaba hablando con ellos lo increpó y lo amenazó.

Agregó que luego se enteró que se trataba de Matías Trogliero, hermano de la víctima y que no lo denunciará pero pidió a los jueces que intensifiquen la seguridad dentro y fuera de la Sala de Grandes juicios de Ciudad Judicial.

Matías Trogliero desmintió lo sucedido en diálogo con este medio y contó que lo que sucedió fue que vio que Latorre lo estaba filmando y le preguntó por qué lo hacía y nada más. Agregó que luego se enteró de los dichos del abogado ante el Tribunal, que se sorprendió y que hasta un policía que estaba allí le dijo que no era cierto.

Juez vs abogado

En su declaración, la esposa de Gómez Paz, Josefina Fresco Drasich, a pregunta de Javier Latorre dijo que mientras esperaba declarar el primer día, escuchó a Sonia Álvarez decir que su hijo era amigo del fiscal Rodrigo González Miralpeix. Además, señaló que eso se sumaba a otras cuestiones que demuestran que amigos de la familia Trogliero intervinieron durante la instrucción también.

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La presidente del tribunal, María Victoria Montoya Quiroga, le consultó al abogado si iba a pedir la recusación del fiscal por ese motivo, lo que Latorre desestimó. Ante ello, el juez Pablo Farah le solicitó al letrado que haga preguntas relativas al hecho, ya que las especulaciones sobre falta de imparcialidad en actores judiciales ya había sido tratada y resuelta anteriormente.

“Evidentemente molesta que hablemos de colegas o funcionarios”, disparó Latorre quien, ante la advertencia del magistrado, retrucó: “no voy a formular más preguntas doctor para no incomodarlo”.  

Los amigos de Gómez Paz lo desmintieron

La segunda audiencia estuvo marcada por las declaraciones de cuatro amigos que estuvieron la noche de la reunión pero que ya se habían ido cuando se produjeron los incidentes que terminaron con el homicidio de Javier Trogliero.

Tanto Gustavo García Saravia, Diego Federik como Nicolás Reimundín y Javier Márquez negaron lo que Gómez Paz relató con detalles el día anterior. Todos declararon no haber escuchado ni visto ningún tipo de agresión física ni verbal de Trogliero hacia el imputado.

Gómez Paz había dicho que Trogliero le había proferido un chiste de mal gusto y en mal tono y que luego, mientras estaban todos presentes –incluidos los testigos en cuestión-, lo había empujado y arrojado contra una mesa. Ninguno de los testigos avaló esa versión.

Solo García Saravia dijo que una vez, tiempo atrás, en un boliche de la Balcarce, estando él junto a Gómez Paz, se cruzó a Trogliero, quien le preguntó, en tono adusto y en referencia a quien después sería su homicida: “¿qué hacés con el boludo este?”.

Todos afirmaron ser amigos de los imputados y apenas conocidos de la víctima y que nunca vieron a Gómez Paz en actitudes violentas. Entre las coincidencias, todos aseguraron que aquella noche se consumió mucho alcohol.