A pesar de la farándula, la política fue la vedette del casamiento de Urtubey

Entre los más de 400 invitados que participaron del casamiento del gobernador Juan Manuel Urtubey y la actriz, Isabel Macedo, se destacaron las figuras más influyentes de la política nacional. 

Aunque la mayoría manifestó que “no era el lugar para hablar de política”, las elecciones de 2017 ya emergen como interés y preocupación de todos ellos. ¿Qué mejor oportunidad que un casamiento para que, entre copas, encontrar un potencial aliado?

Si de política hablamos, la casona donde se realizó la fiesta se tiñó de amarillo-Cambiemos, dejando en claro que el mandatario salteño no dejó amistades en el núcleo duro del kirchnerismo. Sin dudas, aquellos entramados que se pudieron suscitar ayer, quedarán en los rincones de Finca Las Costas y quizá puedan descifrarse en los próximos meses con alguna fotografía que lo confiese.

Chau timbrazo, hola fiesta

La presencia de importantes referentes de Cambiemos complicó el quórum en el timbreo que realizó Cambiemos en gran patte del país. Sobre todo en Buenos Aires, donde participó el presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal. Ambos estaban invitados a la fiesta.

Las figuras destacadas, sin dudas, fueron la de la vicepresidenta Gabriela Michetti, y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, con quien Urtubey tejió una relación de cercanía que se expresó con varias visitas de ambos a la tierra gaucha.

Frigerio llegó a la provincia en la mañana luego de visitar Jujuy, donde encabezó un acto con el gobernador Gerardo Morales, otro de los invitados ausentes y con aviso. Junto con Michetti arribó a Finca Las Costas cerca de las 13, escoltados por un gran operativo de seguridad y en diálogo con LA GACETA señaló que llegaba para “acompañar a un amigo”, en referencia a Urtubey.

Consultado por si lo veía al mandatario salteño como un futuro dirigente del PRO, el funcionario nacional negó dicha posibilidad pero destacó que “es un gobernador que entiende lo que es generar gobernabilidad para que la Argentina esté mejor y para que la gente viva más dignamente”.

Horas antes, y luego de una relajada cena que celebró en una parrillada de calle Balcarce, Michetti no esquivó hablar sobre los índices de pobreza y aseguró que el Gobierno se encuentra trabajando con los gobernadores para combatir este flagelo a través de la “generación de nuevos empleos”.

Otro de los funcionarios de Cambiemos que negó la posibilidad de un armado junto con el gobernador salteño fue el senador nacional, Federico Pinedo, también invitado a la fiesta. El legislador dijo que si bien el PRO “es muy abierto y no tiene problemas en tener candidatos de otro origen”, Urtubey “es muy peronista”.

Recién llegado a Salta, Emilio Monzó habló con LA GACETA y remarcó una idea que había expresado días atrás: "el kirchnerismo terminó, fue una etapa en nuestro país y creo que el peronismo se va a renovar, siempre en alguna otra preferencia con algún nuevo dirigente como caracteriza al peronismo", remarcó el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación. En este sentido, señaló que el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, "cumple un papel clave".

Monzó también se animó a pronosticar que su espacio político, Cambiemos, podría enfrentarse contra Urtubey en 2019 y expresó: "es un gran amigo y seguramente, si es rival, es bueno tener a un amigo de adversario".

Acá no se habla de política

Con respecto a los dirigentes locales, la mayoría de ellos descartó que en la fiesta se fuera a hablar de política. Los diputados nacionales Pablo Kosiner y Javier David, el vicegobernador Miguel Isa, y hasta el propio José Urtubey -hermano del gobernador y dirigente de la UIA- coincidieron en que era un momento para acompañar al gobernador, al que calificaron como “un amigo”.

La gran sorpresa de la tarde fue la presencia de un sonriente Juan Carlos Romero. Histórico formador político y luego ferviente adversario de Urtubey, el senador llegó acompañado de su esposa y solo atinó a decir: “vengo a pasarla bien, como en todo casamiento”.

El intendente Gustavo Sáenz llegó junto a su esposa y bromeó con que si lo invitaban, él se subía a cantar junto a los Tekis. El mandatario dijo que tenía mucha expectativa por la reunión que encabezará Rogelio Frigerio la semana que viene con intendentes de todo el país y confesó que con él sì iba a hablar de política durante el almuerzo.

En otra dirección el intendente de Orán, Marcelo Lara Gros, aseguró que en el casamiento, donde se encontrarán con funcionarios nacionales, aprovecharán para "hablar sobre algunos temas", aunque no le pedirán más recursos para sus municipios.

El intendente del norte provincial también adelantó que esos pedidos se harán, los próximos días, cuando la mayoría de los jefes comunales de la provincia se reúnan con el ministro del Interior en Buenos Aires.