Avalando y desmintiendo el relato de Gómez Paz, declaró Guitián
El imputado por encubrimiento agravado sorprendió a todos y pidió declarar. Su versión difirió de la de algunos testigos.
Parecía que la del martes iba a ser una audiencia más en el juicio por el crimen de Javier Trogliero Álvarez, con declaraciones de policías que poco aportaron a la causa. Sin embargo, el imputado por encubrimiento agravado, Sebastián Guitián, sorprendió a todos cuando pidió declarar ante el Tribunal.
En la primera audiencia, Guitián había aceptado declarar pero luego de escuchar a Juan Carlos Gómez Paz –imputado por haber confesado el homicidio- decidió postergar su declaración al igual que Mario Del Barco –también imputado por encubrimiento- y, a esta altura, el único de los tres acusados que aún no habló, aunque no está obligado a hacerlo.
En el comienzo de su relato, Guitián resaltó que la reunión que se realizaba en la casa de Del Barco en barrio El Huayco, la noche del 1 de junio de 2013, transcurrió con total normalidad, sin incidentes ni agresiones. De esta forma desmintió lo dicho por su amigo Gómez Paz, quien había declarado que desde que llegó, Trogliero le hizo bromas pesadas y algunas acusaciones. Al mismo tiempo, reconoció que todos habían bebido mucho alcohol.
Guitián tampoco recordó ver a Trogliero entrar al baño ebrio y salir mejorado, como dijo Gómez Paz.
El primer enfrentamiento
Alrededor de las 4.30 de la madrugada del 2 de junio, cuando de las 12 personas que habían asistido solo quedaban los cuatro involucrado, Guitián dijo escuchar insultos a los que primero tomó como normales de una reunión de amigos donde se había bebido mucho alcohol pero que luego advirtió que se estaban saliendo de control cuando notó que no cesaban e incluso incrementaban.
“Me di vuelta y vi a Javier (Trogliero) gritándole hijo de puta a Juan Carlos (Gómez Paz) y a este diciéndole que no se meta con su familia porque su madre había fallecido hacía mucho”, contó el imputado y agregó que el primer enfrentamiento se dio cuando ambos se sujetaron, por lo que corrió a separarlos.
Señaló que los dos que se enfrentaban cayeron al suelo en pleno quincho y que él tomó a Trogliero de la cintura para sacarlo. “Javier seguía insultando, estaba empecinado en agredir a Juan Carlos y yo hacía todo lo posible por calmarlo”, declaró.
Una frase “desacertada”
Según Guitián, mientras calmaba a Trogliero en el patio, Gómez Paz pasó por el lado y le dijo a la víctima que se calme porque su auto era el único que quedaba y si se iba no iba a tener en qué volver: “en ese pensé que se me desarmaba todo lo que había logrado calmarlo (a Trogliero) porque se volvió a enojar y volvió a apuntar contra Juan Carlos”, expresó.
A pregunta del fiscal Rodrigo González Miralpeix, Guitián afirmó que pese a que no tuvo esa intención, la frase fue “desacertada” porque volvió a encender el enojo de Trogliero.
Todo por un paquete de cigarrillos
Guitián contó que sacó a Trogliero de la casa y siguió intentándolo calmar en la calle, cosa que creyó haber logrado por lo que lo dejó y, pese a que Gómez Paz estaba en su auto a pocos metros, entró nuevamente a la vivienda a buscar su paquete de cigarrillos porque estaba desesperado por fumar.
“Cuando entré a buscar los cigarrillos, Javier estaba apaciguado, no me explico por qué se volvieron a pelear”, le respondió al abogado querellante Darío Palmier, mientras que al juez Pablo Farah le respondió que “le erró” al pensar que no iban a volver a pelearse.
Su relato sobre la pelea fatal
Cuando buscaba, sin éxito, los cigarrillos Guitián escuchó gritos por lo que salió nuevamente a la calle y los vio en plena disputa.
Allí es donde el imputado dio una versión coincidente con la de Gómez Paz: dijo que cuando salió, vio a Trgoliero encima del homicida, “dominándolo”, por lo que tomó a Javier, lo sacó y lo llevó hasta el auto.
Contó Guitián que en ese momento salió Del Barco y le avisó que Trogliero estaba herido y sangraba: “ese fue un punto de inflexión de Javier, que al saberse lastimado depuso absolutamente todo y para mí también porque me agarró una desesperación enorme al ver una herida sangrante y lo primero que atiné es a llevarlo a que se siente”, relató.
“Le costaba respirar y yo quería saber si era por la pelea o por la herida y lo senté en paragolpes trasero del auto; él me decía que estaba bien”, declaró el imputado quien agregó que Del Barco le trajo una estopa que usó para presionar sobre la herida, ya que sabía que eso era lo conveniente a hacer, pero que Trogliero perdió fuerza y se desplomó.
La llegada de la policía y de la ambulancia
Guitián dijo que días después se enteró que había llamado al 911 pero que no recordaba nada de ello por su estado de shock, lo que molestó a la querella, que sospechó que no decía la verdad en un intento por evitar contar si avisaron de la gravedad de los hechos cuando alertaron a la policía.
No pudo precisar cuánto demoró en llegar la ambulancia pero dijo que a él le pareció una “eternidad”, pero que cuando llegó se lo llevó rápidamente.
Minutos después, los efectivos se llevaron detenidos a los tres amigos y cuando llegaron a la Comisaría 6° vio a Gómez Paz y que este le dijo: “Javier estaba muy pesado, no lo podía parar”, siendo después colocados en celdas diferentes.
“Me pidieron que les diga dónde estaba la navaja pero yo no sabía nada y cuando me enteré que Gómez Paz les dijo que había usado una, yo ya no entendía nada”, expresó desligándose de cualquier dato relativo a lo que Del barco pudo haber hecho con el arma.
“Para mí, Javier era un amigo”
Guitián resaltó frente al Tribunal compuesto por María Victoria Montoya Quiroga, Bernardo Ruiz y Pablo Farah que pese a no ser íntimos y que se conocían desde hacía dos o tres años, consideraba a Javier Trogliero Álvarez como un amigo.
El imputado negó saber el motivo de la pelea y si se trataba de una mujer, además aseguró que nunca lo vio agresivo ni pelearse con nadie nunca.
Contradicciones y coincidencias con testigos
Algunos vecinos de la cuadra declararon como testigos en el juicio dando versiones diferentes sobre algunos hechos. Dos mujeres y un hombre que viven en las inmediaciones de la casa de Del Barco declararon que Gómez Paz era quien agredía a Trogliero mientras este estaba en el piso, pero el imputado sostuvo que ellos “percibieron mal”.
Respecto a lo que escuchó, teniendo en cuenta los dichos de los vecinos, Guitián aseveró que sí oyó que alguien dijo “no me matés que tengo un hijo” y que el único que era padre en aquél momento era Gómez Paz.
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