Temen que el Arenales se convierta en "El Riachuelo" salteño

El Arenales es uno de los ríos más importantes de la provincia y el principal de la Capital. Por eso su recuperación, encauzamiento correcto y saneamiento ambiental se vuelve urgente.

El secretario de Recursos Hídricos de la Provincia, Alfredo Fuentes, está preocupado por evitar que –en caso de no revertir la situación- el Arenales se convierta en El Riachuelo salteño. "Esperamos que no lleguemos a esas instancias", dijo el funcionario en diálogo con LA GACETA y señaló dos ejes puntuales para evitar que el cauce fluvial continúe degradándose: la decisión política del Gobierno –acompañada de fuertes inversiones- y la concientización de los vecinos y empresarios que tienen locales industriales cerca de la rivera.

Esta mañana, una comitiva encabezada por el ministro de Economía Carlos Parodi visitó las obras que se están realizando sobre las márgenes del río para mejorar el encauzamiento y evitar desbordes en la temporada estival. En 2011, la tormenta del 31 de enero dejó a más de 160 familias sin nada, y eso es lo que se busca evitar para el futuro. “Las obras marchan a buen ritmo”, explicó Fuertes, aunque señaló que todavía hay empresarios y vecinos que utilizan al río como un basural, lo que genera el efecto inverso. En las últimas semanas se labraron 20 actas de infracción por contaminación. “Por suerte, mucha gente ha tomado conciencia y denuncia a quienes van a arrojar escombros y residuos en el río, además la Policía también se puso a disposición y se encuentra controlando que no se contamine”, contó el funcionario.

Para Fuertes, el saneamiento del río es fundamental para generar un espacio verde y de esparcimiento en un lugar clave de la ciudad. "Ojalá no me muera sin ver al Arenales sano y limpio", dijo en diálogo con LA GACETA.

Según los datos de la Secretaría de Recursos Hídricos actualmente el Arenales, a la altura del puente de la avenida Tavella, puede procesar 200 metros cúbicos por segundo, lo que está muy lejos de los 700 que provocaron el desastre en 2011. “El objetivo es llevar la capacidad de escurrimiento a 500 metros cúbicos para este verano”, explicó Fuertes y dijo que la obra presenta un avance del 60%.

Evitar los microbasurales

Días pasados, el concejal capitalino Gastón Galíndez (PJ) también recorrió las obras en el Arenales y se reunió con los vecinos de los barrios Ceferino y 13 de Abril, quienes manifestaron la preocupación por la proliferación de microbasurales en la rivera que, además de contaminar el lecho, perjudican el curso del agua y podrían contribuir a futuros desbordes: “los escombros y la basura reducen el ancho del rio y evitan que el agua circule como debe”, relató el edil.

“Lamentablemente existen muchas personas y empresas de contenedores que vienen a arrojar residuos directamente sobre el cauce del río”, aseguró Galíndez, y admitió que “esta situación pone en peligro a todos los barrios ubicados en las inmediaciones de esta gran cuenca hídrica”.