Andrea pidió auxilio antes de ser asesinada por “Chirete”

“Ella (Andrea Neri) pidió auxilio y nadie se lo brindó, fue llevada por la fuerza por él (Gabriel “Chirete” Herrera) hasta un baño, en las narices de los guardias. Ahí la tuvo durante una hora y media, reducida. Después la llevó hasta la celda y la mató. ¿Nadie observó ni escuchó nada?”, preguntó el abogado de la familia de la víctima, Santiago Pedroza, denunciando serias falencias en la seguridad de la Unidad Carcelaria n°1 de Villa Las Rosas cuando la joven fue asesinada, el pasado 5 de enero.

Según el letrado, “se pudo ver en las cámaras de seguridad de ese día como Andrea fue llevada hasta un baño y ahí fue demorada por una hora y media. Estaban en la celda de él (“Chirete”), se pudo ver como salieron y caminaron por los pasillos; ella era llevada por la fuerza y los guardias estaban del otro lado del pabellón, de espaldas. Nadie miraba ni se daba cuenta”, denunció y aclaró que las filmaciones forman parte del expediente judicial.

A partir de estas imágenes que serían claves para el avance de la investigación, Pedroza anticipó que se pedirá ante la justicia la apertura de nuevas investigaciones de altos funcionarios del Gobierno y de guardias del Servicio Penitenciario. De prosperar, no se descartan nuevas detenciones por el femicidio de Andrea Neri.

Simultáneamente, la familia de la joven demandará civilmente al Gobierno de la Provincia de Salta por las falencias comprobadas en el sistema de seguridad de la cárcel por las que están imputados y detenidos el Prefecto Juan Carlos Gutiérrez; el Alcaide José Luis Ávalos; Héctor Augusto Franco, Jefe del Pabellón “E” de la Unidad Penitenciaria, y Fernando Daniel Velázquez, Subjefe del Departamento de Tratamiento y Vigilancia de la Unidad Carcelaria.

¿Convivencia?

A partir de las últimas imágenes de las cámaras de seguridad el día que Andrea Neri fue asesinada, la familia de la víctima sospecha aún más de los manejos y libertades que habría tenido “Chirete” para moverse dentro del penal de Villa Las Rosas.

“No sé si había convivencia entre “Chirete” y los guardias, pero si hubo un gran descuido y negligencia, en el límite de la convivencia”, aseguró Pedroza.

Esta acusación se suma a la conocida semanas atrás acerca de que guardias del Servicio Penitenciario le habrían hecho firmar un documento a la joven mamá haciéndose responsable de lo que pudiera pasarle durante las visitas íntimas que mantenía con el doble femicida de la cárcel.

“Quieren hacer creer que Andrea firmó su muerte”, aseguraba el papá de la víctima, Juan Pablo, advirtiendo sobre presuntas maniobras para “hacer creer que mi hija tuvo la culpa de lo que le pasó”.

“No pueden hacerte firmar un papel y meterte en la jaula del león”, decía.