Salta contará con 30 pulseras para prevenir la violencia de género

El Ministerio de Seguridad y el de Justicia anunciaron la aplicación de un nuevo sistema monitoreado por la policía.

22 Feb 2017
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Ante los preocupantes índices de denuncias de violencia de género que se radican en Salta, el gobierno de la provincia logró que la Nación le conceda 30 dispositivos para aplicar a casos graves y que contarán con el monitoreo y la intervención inmediata de la policía.

La ministra de Justicia y Derechos Humanos, Pamela Calletti, y el ministro de Seguridad, Carlos Cayetano Oliver, anunciaron el lanzamiento de la llegada a Salta del programa SUMA (Sistema Único de Monitoreo de Agresores), por el que a través de un convenio con Nación, Salta fue una de las cuatro provincias elegidas para recibir los dispositivos.

“Tenemos capacidad operativa para más y ya los solicitamos pero eso depende de que nos los manden, por ahora estamos en un plan piloto”, explicó Calleti.

Oliver confirmó que la entrega de los mismos y el comienzo de su utilización es cuestión de semanas: “estamos ultimando detalles en el trabajo con el Ministerio Público y el Poder Judicial para entregar los dispositivos, en semanas empiezan a trabajar, solo faltan algunas capacitaciones”, señaló.

Sin embargo, la entrega de los dispositivos requiere de un paso previo que explicó la ministra Calletti: “antes de asignar el dispositivo hay que hacer un análisis de riesgo del agresor para ver la gravedad del caso porque esto se suma al botón antipánico, a las consignas y rondas judiciales y a la privación de libertad en los casos más graves”, indicó.

Un agresor deberá utilizar dos dispositivos: una pulsera o tobillera que debe tener puesta las 24 horas del día y un rastreador del que solo puede separarse algunos metros (para cuando esté en su casa por ejemplo). Mientras que la víctima deberá llevar siempre consigo su rastreador.


Todos estos elementos son monitoreados por el Centro de Video vigilancia y en caso de que se detecte que el agresor y la víctima están más cerca de lo permitido, vulnerando una restricción de acercamiento, se dispararán alarmas tanto en los dispositivos de ambas personas como en el 911, desde donde se enviarán a los efectivos que se encuentren más próximos en la zona.

Este sistema tiene una doble ventaja, según Calletti, ya que será prueba de desobediencia judicial y violación de las prohibiciones de acercamiento y  además es un método de prevención.


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