En Cafayate se escuchó folclore hasta el amanecer

Desde el folclore más tradicional hasta aquel que se fusiona con otros géneros y se pone cada vez más rockero. Así de amplia fue la propuesta de los artistas que se presentaron en la segunda noche de la Serenata a Cafayate, también atravesada por el festejo del carnaval que se sintió abajo y arriba del escenario. La fiesta, como sucede todos los años, terminó al amanecer. 

El festival arrancó a las 21.30 con Los de Cafayate, que interpretaron un clásico de la Serenata, el vals “Mal de luna”. Al conjunto local le siguió Viviana Fuentes, ganador de la Pre Serenata, Ubaldo Díaz, Cafayate Canto, Los Salamanqueros, el lutier Daniel Damico y un grupo de copleros cafayateños, que cerraron la primera parte del encuentro folclórico.

Durante la segunda luna en la Bodega Encantada hubo una parte especialmente dedicada a homenajear al Cuchi Leguizamón porque este año se cumplen 100 años de su nacimiento. El encargado de rendirle tributo, como siempre, fue su hijo Luis Leguizamón, quien interpretó “Chacarera del expediente”, “La Pomeña”, “La arenosa”, y otros temas. Tras recibir una placa de reconocimiento se despidió del público contando que este año se realizarán diferentes homenajes para recordar a su papá.

A Leguizamón le siguió Bruno Arias con una propuesta que tuvo músicos invitados e integró artistas plásticos locales que hicieron sus obras en vivo. La generosidad musical y la improvisación son rescatables cualidades del cantante jujeño que le pone voz a los silenciados y olvidados, las comunidades originarias de Latinoamérica.

Arias llegó a Cafayate, se encontró con amigos y los invitó a subir al escenario Payo Solá y así armó un show que tuvo de todo: arte visual, homenajes y carnaval. Lo acompañaron el Cuarteto Karé, de Rosario –Santa Fe-, también el poeta Carlos Morello; el compositor cafayateño Lucio Espinosa; el pianista y también hijo del Cuchi; Moro Leguizamón y una comparsa de caporales. Cerró la primera parte de su espectáculo con “Sol de los Andes”.

El folclore tradicional llegó de la mano del dúo Alma Carpera, que con la fuerza vocal que lo caracteriza entregó clásicos del cancionero popular, y Las Voces de Orán, con más de 40 años de trayectoria.

Los Huayra encendieron la fiesta en la Bodega Encantada. A ellos les siguió Cabales, Lucio “El Indio” Rojas, con un show de casi dos horas, Yacones, que cantó temas de su disco “Para tu alma”, Vale Cuatro y para el final, regresa Bruno Arias.