Fallaron los semáforos y las picadas fueron un escándalo

La cita fue el sábado desde las 16 en el autódromo de Salta, Martín Miguel de Güemes. Las “Picadas show” se habían anunciado como el evento automovilístico del fin de semana que reunía a los autos más rápidos del país. Demoras, contratiempos y fallas en los semáforos despertaron las quejas de pilotos y el público y generaron un escándalo. ¿Qué pasó?

La primera fecha de las picadas se puso en marcha dos horas después de lo programado porque la organización tuvo complicaciones con los semáforos que fueron alquilados especialmente para la fecha. Nunca funcionaron. Los autos largaron cuando uno de los organizadores bajaba sus brazos. 

Pablo D’Abate, uno de los organizadores  apuntado por las críticas, aseguró que “tuvimos contratiempos, intentamos darle solución pero las cosas nunca funcionaron como pensamos”, dijo en diálogo con LA GACETA. El enojo de los pilotos salteños y de los que llegaron de Jujuy, Tucumán, Santiago del Estero, incluso desde Buenos Aires, se hizo sentir en la pista. 

Otra de las críticas apuntó a los costos para correr. Algunos denunciaron sobreprecios. “Cada piloto tenía que pagar $50 para correr. Acá no se les cobró más que eso”, dijo ante las versiones de quienes aseguran que debieron pagar $100 por hacerlo. 

“Son desagradecidos”, opinó D’Abate porque que los pilotos se quejaron por $50, pero “cuando van a picar a otras provincias les cobran la inscripción y el estacionamiento”. 

Ante las críticas de los pilotos y el anuncio de que no volverían a correr en Salta, el organizador respondió que si esto ocurre “vamos a apostar más a los pilotos locales que quieran correr y no traer personas de afuera”, descargó. 

Las demoras para iniciar la fecha retrasaron el cronograma de actividades y quienes se quedaron sin correr lo podrán hacer en 20 días cuando se corra la segunda fecha.