Cuatro perspectivas para pensar la igualdad en términos de identidad sexual

Ayer fue el día internacional del orgullo LBGT (Lesbianas, bisexuales, gays y transexuales) y en Salta se hicieron varias actividades para celebrarlo. Picnics, radios abiertas, performances públicas fueron algunas de las manifestaciones que reclamaron mayor inclusión y el cumplimiento efectivo de derechos conquistados hasta el momento.

En esta nota te presentamos cuatro perspectivas diferentes sobre las identidades sexuales, que pueden ser el puntapié para pensar qué tan cerca o que tan lejos estamos como sociedad de generar la inclusión de las personas con diferentes orientaciones sexuales.

Avances y retrocesos. Luchas que siguen vigentes

Mary Robles fue la primera persona salteña en obtener el cambio de identidad en su documento.

Conocida militante por los derechos de las personas trans y coordinadora de la Asociación de Travestis Transexuales y Transgéneros de Salta opinó sobre la situación actual de las personas que forman parte de la diversidad sexual.

“Hay retroceso expresado en que la ley de cupo laboral trans ya tiene media sanción y ya tendría que estar reglamentada y aprobada. Por otro lado, hemos logrado derogar los artículos contravencionales y se endureció el articulo 114 y lamentablemente eso nos perjudica porque las chicas trans y están ofreciendo sus servicios en la calle porque ni siquiera tienen una oportunidad igualdad de oportunidades como las tienen todos: de tener un trabajo digno, una vivienda digna y una salud digna también” expresó a LA GACETA Robles.

Además consideró que “es un retroceso porque el gobierno no lo quiere hacer y no lo está haciendo. Con los ediles municipales pasa lo mismo, somos vecinos también, presentamos petitorios y esperamos que el ministerio de derechos humanos se pronuncie a favor”.

Por otro lado, la activista por los derechos de las personas trans cargó contra la institución policial. “No puede ser que una policía sea retrograda y nos persiga como nos perseguía años atrás en los 90, y volver a los 90 quiere decir que retrocedimos un montón a todo lo que avanzamos” consideró.

Sobre las necesidades de este sector social, Robles manifestó que: “la mayor demanda que tenemos en este momento es que está saliendo la nueva juventud capacitada y con estudios. La gente ya está capacitada como para tener un trabajo digno, pero no lo hay”.

Aún así, la referente de la comunidad trans encontró motivos para celebrar el orgullo. “Primero celebramos la vida, aprender a amar y a querernos un poquito más y que tenemos una igualdad y un derecho y lo demás se puede luchar” sentenció.

“Es difícil ser aceptado”

Sergio Maizares tiene 18 años y durante ayer salió a la calle con la bandera que lleva los colores del arcoíris.

Sobre la vivencia de su sexualidad como joven expresó: “yo lo vivo tranqui, me costó llevarlo, pero gracias a mis amigos, al ambiente y al colectivo LGBT que conocí por Facebook salí adelante con todo esto”.

Aun así, para Sergio no fue fácil ser aceptado por sus elecciones sexuales. “Lo más difícil es ser aceptado y conseguir los derechos que tienen todas las demás personas. A mí me ayudaron mis amigos más que nada y empezar a descubrir cosas nuevas” contó el joven.

Sergio junto a una amiga y un amigo salen a la calle y no tienen miedo a los prejuicios aunque acepta que “el mundo está poniendo muchas trabas para que la gente se muestre como es”.

Por último, el joven describió su lucha en estas palabras: “queremos tener los mismos derechos que todos, los cupos laborales trans y que no se discrimine a las personas de diferente sexo”.

La educación como herramienta de inclusión

Julieta Agustina Cruz no se sintió identificada con las actividades que se realizaron ayer pero se mostró a  favor de apoyar a las compañeras.

“Hoy se me hace que es un día de política, que venimos a apoyar a las compañeras a mis compañeros trans que quieren ingresar a la política y yo estoy siempre presente” dijo Julieta.

La joven de 23 años afirmó que “para mí el ser trans en la sociedad no es difícil, solo basta con querer ser y  dejar ser lo que vos querés ser y demostrar. Yo creo que hoy en día la mentalidad  del salteño está abierta a muchos pensamientos y creo que ya no estamos en los 80 y 90, estamos en el siglo 21 y creo que la mentalidad es abierta”.

 Su experiencia de vida y sus sueños la llevaron a estudiar en la Universidad Nacional de Salta, pero según contó no fue una grata experiencia por la discriminación que tuvo que padecer.

“Estuve estudiando en la UNSA y noté mucha discriminación al ser una chica trans, y creo que en las universidades y en la escuelas debería haber un poco más de educación en la diversidad sexual porque ya los chicos discriminan y creo que una chica trans tiene derecho de estudiar, de ser una persona y de capacitarse en algún curso o capacitación” manifestó la joven.

Además opinó: “yo creo que esos temas deberían tratarse más en la sociedad, abrirle más la mentalidad a los jóvenes e ir también a las universidad, colegios, escuelas y enseñar desde la primaria”.

Abrir la mente y el corazón

Camila Maza es artista y es muy reconocida por su presencia en las redes sociales, más de una vez le tocó sufrir la discriminación y el maltrato en estos medios.

“Todavía se señala a la persona. Yo lo vivo en carne propia porque soy artista, hago presentaciones en vivo, estoy en las redes sociales y nunca falta el tonito discriminativo todavía existe el señalamiento” contó.

Sobre la situación actual de la comunidad trans opinó que “tenemos leyes que nos amparan, leyes que nos dan derechos. Ley de identidad de género que tiene varios artículos, divina una ley hermosa pero que está mal articulada. Necesitamos muchos más apoyo legislativo para que esta ley sea lo que es, que es una gran ley de inclusión”.

Además agregó que para que haya inclusión “falta un poco más, más en Salta que estamos en una sociedad tan errada todavía, tan conservadora, una sociedad católica, que todavía pensamos con el crucifijo en la mano como se dice. Me incluyo porque yo también soy muy católica soy de mucha fe, pero prefiero buscar la empatía, el par a par, la tolerancia antes que ir a confrontar o a no respetar a mi prójimo”.

Por último, la pre candidata a concejal en el municipio capitalino reflexionó: “se está abriendo un poquito más la cabeza, el corazón de las personas pero sino no estaríamos luchando por el día del orgullo”.