“Hay bandas que hacen hasta ocho shows por noche”
A una semana del terrible accidente que sufrió la banda de Willy Campero, el “negro” Leiva y Gaby Morales reflexionaron sobre los riesgos a los que se exponen los artistas. Críticas a los productores.
Hace una semana la banda de cumbia que lidera Willy Campero se salvó de milagro. En una curva sobre la ruta 34 –camino a Cafayate- perdieron el control del auto y terminaron volcando, cayendo a un precipicio de más de 20 metros. No hubo víctimas fatales aunque sí algunos heridos. La banda, luego de reponerse del accidente, fue a tocar igual. Tenían que cumplir con varios shows.
“Lo que le
pasó a Willy le podría haber pasado a cualquiera”, dice David Leiva, ex líder
de la banda de cumbia Los Juveniles Panda y ahora cantante solista.
En diálogo
con LA GACETA, “el negro” Leiva reflexionó sobre el terrible accidente que
sufrieron sus colegas y lamentó que la mayoría de las bandas del ambiente
tropical se tengan que exponer en las peligrosas rutas argentinas cada fin de
semana. “Hay veces que tienen que hacer hasta siete u ocho shows por noche”,
explica el cantante.
“A los productores –que son dueños de los grupos- no les importa si los músicos duermen en un hotel o en el banco de una plaza”, se quejó al denunciar la precariedad a la que se tienen que someten muchas veces los artistas: “para tratar de cumplir con los compromisos, los choferes le tienen que meterle en la ruta a 130, 140 (kph)”, admite.
Leiva lleva
años en el ambiente y es uno de los máximos referentes de la cumbia local.
Recién con el tiempo pudo dejar el frenesí de las giras permanentes. “Yo ahora
tengo una familia y lo pienso mucho antes de salir de gira, sé que detrás de mí
tengo hijos. En lo personal me alejé un poco de eso”, contó en la entrevista: “uno
sale a la ruta y es una lotería”, sentenció.
Cumbia
descartable
Leiva
expresó que parte de los riesgos que corren las bandas de la movida tropical en todo el país se
deben a las ambiciones de los productores. Habló sobre el fenómeno de muchos conjuntos que cobran fama –a partir del marketing mediático que gestionan los productores- y duran
apenas algunos meses. “Yo le llamo la cumbia descartable”, dice Leiva y compara
el género con las bandas con mayor trayectoria: “era distinto, antes la preocupación era por la
calidad, por hacer buenas canciones, ahora todo pasa por la cantidad”.
“Los productores
los exprimen a las bandas nuevas”, disparó Leiva y agregó: “la mayoría de los artistas
son muy mal pagos, por eso tienen que exponerse a tantas salidas por noche”.
Es una
locura
El cantante
Gaby Morales, que saltó a la fama luego de llegar a la final del certamen
televisivo “Operación Triunfo”, también opinó sobre las circunstancias que les
toca vivir a muchos artistas que salen de gira. “Aunque nosotros no hagamos
tantos shows por noche, es raro que hagamos dos presentaciones en un día, a la
ruta hay que tenerle siempre respeto”, reflexionó.
“Es una
locura que tengan que hacer hasta ocho shows por noche”, consideró Morales y
explicó: “el folklore por ahí es más diferente a la cumbia, porque no se toca
en boliches, generalmente es en un festival y una sola presentación por noche”.
De todas formas, cuenta, la profesión del artista los obliga a surcar
las rutas argentinas: “siempre es peligroso salir, uno nunca sabe qué puede
pasar”.
Según el cantante,
que cuenta que cuando sale a las rutas es “el mejor copiloto del mundo”, lo
importante en las giras “es tenerle respeto a la ruta, ir tranquilo, a una
velocidad prudente”, y agrega: “uno pueda ir bien, con prudencia, pero del otro
lado capaz que no”.