Coloquio de IDEA: el optimismo reina en Mar del Plata

El rumbo económico y las elecciones parlamentarias entusiasman a los asistentes a la cumbre que se realiza en la ciudad balnearia. Ejecutivos de compañías, sindicalistas y políticos esperan que la actividad siga repuntando. A la espera del Presidente

12 Oct 2017
1

EL MENSAJE DE LA GOBERNADORA. “La reconstrucción de la Argentina es entre todos”, dijo María Eugenia Vidal al inaugurar la cumbre empresaria. dyn

El 53 coloquio de IDEA rezuma optimismo. Una parte de ese optimismo es aportado por los organizadores. Esta es, para la Argentina, la cumbre empresarial del año, y el rumbo económico del gobierno de Mauricio Macri, así como sus perspectivas electorales, entusiasman a los ejecutivos. Ese entusiasmo no siempre es fácil de explicar, pero en este caso es bastante sencillo de apreciar: el lema del encuentro, “Transformándonos”, es casi un sinónimo de “Cambiemos”.

“Transformarse es cambiar sin perder la esencia, los valores”, esclarece, para más datos, Javier Goñi, el presidente de IDEA, durante su discurso de bienvenida.

Pero el optimismo no es patrimonio de los anfitriones. Los invitados también lo trasuntan. Los oficialistas, por obvias razones. Los adversarios, en todo caso, lo dejan ver mediante la prudencia de sus posturas. Sus cuestionamientos, durante el cóctel en el lujoso lobby del Sheraton de Mar del Plata, se convierten, apenas, en advertencias hacia el futuro.

Los sindicalistas

Antonio Caló, el secretario general de la poderosa Unión Obrera Metalúrgica, confirma que, aunque lo invitaban todos los años, esta es la primera vez en cuatro años que viene al coloquio. “Y no vengo a plantear nada, sino a escuchar”, aclara quien, durante el último gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, fue uno de los actores de la división de la CGT y lideró la facción oficialista, mientras que Hugo Moyano quedaba a la cabeza del sector opositor. “Mi gremio, entre 2015 y 2016, tuvo 25.000 despidos. Pero este año hubo 4.000 retiros y 5.000 ingresos. Eso es positivo. No es lo mismo ahora que hace dos años”, argumenta. “Queremos crecimiento y también fuentes de trabajo. Que estén mejor los trabajadores, y también el país y la industria. Con empresas grandes, hay sindicatos grandes”. Caló también dice que “el pueblo apuesta a la esperanza”. En todo caso, alerta, “el país va a estar bien cuando los gremios y las empresas discutamos con una inflación anual del 4%”.

Juan Carlos Schmid tiene otro tono. Pero no manifiesta una postura sustancialmente diferente que la de Caló. “Queremos contribuir con ideas. A nuestra postura con respecto al mercado laboral y con respecto a la situación económica actual, ya la hemos fijado en el comité central confederal”, contesta, escuetamente, uno de los triunviros de la CGT. En todo caso, reniega de la denuncia genérica del oficialismo contra “las mafias de los gremios”. “En la Argentina hay 3.000 gremios: me parece aventurado hablar de mafias. Deberíamos preguntarnos si queremos una democracia sin sindicatos, que son la contraparte (de la patronal) para lograr equilibrios”, desenvaina. Pero no hay beligerancia en el discurso de Schmid respecto del corto plazo. La reforma laboral de la que tanto habla la oposición -y que tanto desmiente el macrismo- es “un desafío que hay que observar junto con la marcha de la economía”. El diálogo con el Gobierno son “tratativas que hay que ver cómo se van resolviendo después de las elecciones”, teniendo en cuenta los anuncios de futuros aumentos de las tarifas de los servicios públicos y de los combustibles, a partir de su desregulación. Y consultado respecto de si habrá o no un paro general en lo que resta del año, se limita a afirmar que “no descartamos la medida de fuerza”.

El opositor

A falta de referentes kirchneristas en el encuentro al que la ex Presidenta no fue invitada, ni al que ella pidió asistir, una de las figuras opositoras de la velada es José Ignacio de Mendiguren, diputado por el massista Frente 1País. “Debemos demostrar que somos capaces de dialogar y eso viene ocurriendo en el Congreso desde el año pasado. Soy parlamentario desde hace cuatro años, y a los dos primeros los consideré un verdadero fracaso: ni siquiera pudimos debatir sobre el Código Comercial. Eso cambió. Nosotros, justamente, competimos para llevar adelante propuestas superadoras, no para que fracase el Gobierno”, asevera.

En mayo pasado, el ex titular de la Unión Industrial Argentina había comparado el plan económico de Cambiemos con el que llevaron adelante Domingo Cavallo durante el menemato y José Alfredo Martínez de Hoz durante la última dictadura. Anoche, celebración de las PASO mediante, sus críticas tuvieron otro cariz.

Postuló que los “brotes verdes” de la economía deben ser “sustentados”. Sostuvo que las tasas de interés al 27% que mantiene el Banco Central sólo alientan la especulación, porque brindan ganancias en un solo año que en el resto del mundo sólo se consiguen a 20 años. Reclamó que el Gobierno reduzca el gasto improductivo del Estado y “mejore la facturación” del país mediante las exportaciones, para que ello reduzca el déficit y permita disminuir la presión fiscal, 11 puntos mayor que la de Chile. Y manifestó que en el sector político en que militan no quieren “cualquier crecimiento económico. No queremos un crecimiento económico en el cual haya también crecimiento de la pobreza”.

El oficialista

Adrián Pérez, el secretario de Asuntos Políticos del Ministerio del Interior, fue una de las figuras macristas que pasaron por el cóctel del 53 Coloquio de IDEA, y se ocupó en subrayar los “cambios” en materia electoral. “Estamos trabajando en la seguridad y la transparencia de los votos”, definió, para opinar que el escrutinio de las PASO no fue lento, “sino que se trató de una elección pareja”. El ex diputado del massista Frente Renovador, precisamente, descartó de cuajo la reciente advertencia de la ex mandataria, quien ayer, en una conferencia en el Instituto Patria, agitó el fantasma de las irregularidades en los comicios. “La transparencia está garantizada, el sistema se puede auditar, y a las 21 tendremos los primeros datos”, anticipó. Marchaba hacia el auditorio, porque después de las palabras de Goñi tenía lugar la charla de la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, que eludió el contacto por la prensa usando un acceso lateral para llegar y partir. “Seguramente no vamos a ver consumados los cambios que iniciamos, pero tenemos el orgullo de sentirnos protagonistas de ese cambio”, comenzó diciendo la mandataria bonaerense. Confirmando que “cambiar” es el gran verbo de la cumbre empresarial…

Comentarios