Decía vender materiales eléctricos pero tenía materia prima para producir cocaína

Un hombre fue condenado a cuatro años de prisión por comercializar sustancias químicas controladas sin las debidas autorizaciones.

12 Oct 2017
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foto ilustrativa Ambito Financiero

El Tribunal Oral Federal N°1 de Salta condenó a Pedro Héctor López a la pena de cuatro años de prisión, tras considerarlo autor del delito de tenencia de materias primas para la producción o fabricación de sustancias estupefacientes con fines de comercialización.

En el juicio desarrollado entre septiembre y octubre ante el Tribunal Oral Federal N°1 de Salta, los fiscales generales Carlos Amad y Francisco Snopek tuvieron por probado que López tenía en su poder materias primas para la producción o fabricación de sustancias estupefacientes con fines de comercialización, por lo que solicitaron que se lo condenara a la pena de 4 años de prisión y así lo hicieron los jueces Marta Liliana Snopek, Mario Marcelo Almaraz y Federico Díaz.

La investigación se inició en abril de 2010, a raíz de actuaciones administrativas de la Subsecretaría Técnica de Planeamiento y Control de Narcotráfico, originadas por una Resolución de la por entonces Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar), en la que se indicaba que la firma “Reactivos Salta”, que encabezaba López, comercializaba sustancias químicas controladas sin las debidas autorizaciones de la autoridad de control. Así, se efectuó una inspección en la que se encontraron cinco cuñetes que contenían Manitol y una bolsa plástica que contenía 500 gramos de la misma sustancia.

El 4 de mayo de 2010, se dispuso el allanamiento del local comercial de López, en el cual se encontraron cajas con frascos de vidrio y plástico, en cuyo interior había líquidos varios como permanganato de potasio, amoníaco, ácido sulfúrico y tolueno, como así también se hallaron elementos de laboratorio, un talonario de facturas “A”, cinco envases con la leyenda “manitol” –tres de los cuales contenían una sustancia polvorienta de color blanca cristalina-, una bolsa con una sustancia blanca identificada con la letra “F”, dinero en efectivo y un frasco de vidrio de 20 mililitros de lidocaína, entre otros de elementos de interés para la pesquisa.

Asimismo, la Sedronar informó que la empresa de López no figuraba inscripta en el Registro Nacional de Precursores Químicos y que en la inspección efectuada oportunamente se habían hallado gran cantidad de precursores, sustancias de corte o estiramiento, un listado de precios de las mismas con una marcación de un 600 por ciento superior a la de los de valores del mercado y una balanza de precisión para fraccionar esos productos. Agregaron que esa actividad era desarrollada tras la fachada de un comercio dedicado a la venta de materiales eléctricos.


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