Cuentan los pasillos: en el Concejo nadie tiene mayoría y la presidencia puede ser para cualquiera

La elección de autoridades en la Legislatura Provincial significó un revés político para el espacio político que comanda el intendente Gustavo Sáenz junto al PRO y el romerismo. Pese a tener números necesarios para ser parte de las autoridades, este sector quedó afuera de todo en la Cámara de Diputados y Senadores. Teniendo en cuenta esos antecedentes el oficialismo municipal no quiere sufrir lo mismo en el Concejo Deliberante.

Pero esta misión no parece ser una tarea fácil. En un futuro no muy lejano el intendente capitalino se imagina recorriendo la provincia para difundir sus propuestas como candidato a gobernador; y para sentirse respaldado preferiría que un alfil ocupe la presidencia del Concejo. Para alcanzar este objetivo Cambiemos País deberá consensuar con otras fuerzas de ideas políticas similares o muy distintas.

Las autoridades de Diputados se aprobaron en una sesión escandalosa

De respetarse la voluntad popular expresada en las urnas el pasado 22 de octubre, alguno de los concejales que respalda la gestión de Sáenz debería ocupar la presidencia, mientras que las vicepresidencias estarían en manos de Memoria y Movilización y el Partido de la Victoria. Pero en los pasillos se dicen muchas cosas, entre ellas que la oposición quiere quedarse con la presidencia para sabotear el proyecto municipal.

El bloque oficialista tiene ocho votos asegurados –seis de un Cambio para Salta y dos del PRO- pero la presidencia se consigue con once. La oposición, compuesta por el Partido Justicialista; Memoria y Movilización Social; Partido de la Victoria, Unión Cívica Radical y Salta Somos Todos, posee 12 votos y tendría la posibilidad de imponer sus candidatos. Esta alianza resulta difícil de imaginar, pero en el mundo de la política actual todo es posible.

Entre los saencistas, Matías Canepa es el que corre con ventaja para aspirar a la presidencia. Aunque el ajustado margen de maniobra provocaría que este nombre pueda sustituirse en pos del diálogo y acordar un consenso con otras fuerzas. 

El Partido Obrero tendrá una única representante y su voto no influirá en la elección de autoridades porque históricamente los dirigentes de este espacio político optan por no participar de ese debate y se retiran del recinto.

En los pasillos del edificio ubicado en avenida del Libano se barajan diferentes posibilidades y la lluvia de ideas parece no tener fin. “Puede ser una elección voto a voto”, “todo se va definir recién en la sesión del domingo” y “el presidente saldrá del consenso”, son algunas de las frases que vaticinan con esperanzas y ansiedad aquellos que desean suceder a Ricardo Villada en el estrado de la presidencia.

El domingo, desde las 10, asumirán 21 concejales en la ciudad de Salta (14 nuevos y siete reelectos) y después de la emoción de jurar por Dios, la Patria o su honor deberán tomar su primera gran decisión: elegir las autoridades del cuerpo. Todo cambia hora tras hora y el resultado parece difuso en un Concejo que estará signado por la puja de poder entre la Provincia y la Municipalidad.