25 Abr 2017
Llegó el otoño y los chicos necesitan fortalecer sus defensas para hacerle frente al frío. Por eso tendremos que incorporar a su dieta, alimentos que aporten más energía y protejan el sistema inmunológico. Si el cuerpo recibe los nutrientes adecuados estará en condiciones de prevenir resfríos y gripes.
Cuando las temperaturas descienden es importante consumir alimentos que tengan una acción desinfectante y antioxidante, que posean más calorías y estimulen el buen funcionamiento del hígado y la vesícula biliar, favoreciendo la digestión de las grasas.
Algunos alimentos fundamentales para pasar el otoño y esperar el inverno con las fuerzas suficientes, son la granada, chirimoya, uva, banana, naranja, pomelo, mandarina, manzana, membrillo y frutos secos, también el brócolis, coliflor, calabaza, berenjena, cebolla, lechuga, zanahoria y repollo. No debemos olvidar la incorporación de pastas, carne, pollo, pescado y lácteos para el buen funcionamiento del organismo.
Durante los meses de frío es recomendable aumentar la ingesta de alimentos que contienen vitamina C, azúcares, hierro, yodo y ácido cítrico.
Sabemos que la incorporación de líquidos es importante para el normal funcionamiento del organismo. Nada mejor para los chicos que una sopa bien calentita antes de ir a la cama o un rico café con leche en el desayuno.
¡Los no en la alimentación otoño-invierno!
NO es recomendable sustituir las colaciones de frutas o yogur por alfajores o chocolates. Los niños pueden comer dulces, pero con moderación.
NO se deben eliminar de las dietas las ensaladas o preparaciones con verduras frías.
NO es necesario servir porciones más generosas a los niños cuando bajan las temperaturas.
Sabías qué?
La lenteja es una legumbre otoñal por excelencia y al combinarlas con arroz obtenemos proteínas de muy buena calidad, además de hierro, vitamina B y ácido fólico.
Con el asesoramiento de Marianela Barrionuevo. Licenciada en Nutrición.
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