Ladrones de narcos: la investigación que terminó en la detención de una empleada judicial y un gendarme salteño

Es una historia del mundo narco en la que sobran ingredientes especiales. Una banda que se dedicaba a robar la carga a narcotraficantes y que estaba integrada por un gendarme y una funcionaria judicial salteña y ex candidata a concejala, fue desarticulada en Tartagal cuando trasladaban 25 kilos de cocaína hacia Tucumán y Santiago del Estero.

Personal de la División Antidrogas Tucumán de la Policía Federal, al mando de los comisarios Jorge Luján y Santiago Hernández, de manera conjunta con Gendarmería Nacional y la policía salteña, investigaban una organización que distribuía la sustancia en toda la región.

Luego de un año de trabajo, las pesquisas establecieron que esta no era una organización común, sino una que se dedicaba a “mejicanear” la droga, como usualmente se conoce a quienes les roba a importantes narcos y después la venden. “Fue uno de los trabajos más difíciles que me tocó realizar porque vivían cambiando de movimientos. Creemos que era para despistar a sus víctimas”, indicó Luján.

Los agentes antinarcóticos recibieron el miércoles una información muy valiosa. A sus oídos llegó la versión que a un narco salteño le habían quitado una importante cantidad de droga. Siempre de acuerdo el dato investigado, al hombre que había contratado para que llevara la cocaína se quedó con el cargamento.

El seguimiento

Los uniformados no sólo confirmaron esa versión, sino que confirmaron que saldrían el viernes al mediodía desde General Mosconi. Cuando una pareja que se trasladaba en un Chevrolet Onix se dio cuenta que los estaban persiguiendo, decidieron escapar hacia la localidad de Tartagal.

En el trayecto, según confirmaron fuentes judiciales, los ocupantes del auto arrojaron por la ventanilla del auto una mochila en la que llevaban más de nueve kilos de cocaína. Y después de una larga persecución, lograron arrestarlos. Allí detuvieron a un gendarme (habría estado de licencia, pero lucía el uniforme para no ser detenido por sus compañeros) y a la empleada judicial que hace muy poco tiempo trabajaba en una oficina de Violencia de Género en los tribunales tartagalenses y que además fue candidata a concejala por Un Cambio de Salta.

En las pesquisas se mostraron sorprendidos por la cantidad de droga que habían secuestrado. Sabían que la carga era mucho más importante por lo que decidieron pedir al juez federal de Salta una orden de allanamiento en un domicilio que tenían vigilado. Allí, según la información oficial, detuvieron a otras dos personas y encontraron otros 16 kilos de cocaína.

Más líneas

La detención de la empleada judicial y del gendarme conmocionó al norte salteño. Se sospecha que la banda tendría más integrantes y que estaría ramificada en distintas provincias del NOA. “Estamos trabajando todavía, pero no puedo adelantar nada”, explicó Luján.