La intervención del BCRA no logró frenar la suba del dólar

El Banco Central volvió a intervenir en las operaciones de la plaza cambiaria.

La intervención se realizó apenas pasado el mediodía cuando la cotización del billete, que venía de cerrar a $20,19 para la venta mayorista el viernes, traspasó la barrera de los $ 20.26. "El mercado abrió bien tomador con una demanda sostenida que impulsó los precios hasta que se plantó el BCRA", explicó Agustín Alvarez, de Global Agro.

"Con sus primeras ventas el BCRA desinfló el precio hasta 20,24, pero la demanda siguió muy activa por dolarización de portafolios ante la recuperación global del dólar", explicó a La Nación Fernando Izzo, de la corredora de cambios ABC.

La referencia que planteó Izzo alude a la valorización del 0,7% promedio que registró en la jornada el dólar en el mercado internacional, medido por el Dollar Index que lo coteja frente a otras 6 divisas semejantes. Ese avance llegó tras varios días de aumento en el rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos (la tasa a 10 años llegó a superar 2,99% antes de cerrar en 2,975, con otra suba del 0,5% en el día) y detonó depreciaciones de entre 1 (real) y 2% (peso mexicano) en la región.

Esto obligó al BCRA a volver a intervenir en el mercado, tras dos semanas de abstinencia, para tratar de hacer "sintonía fina" entre la necesidad de no recaer abiertamente en una situación de atraso cambiario y la de no fomentar deslizamientos del tipo de cambio, tras haber quedado a la vista en los últimos meses que, junto a los tarifazos, fueron los principales responsables del rebrote inflacionario.

El valor al público del billete, siguiendo esa tendencia, cerró a un promedio de $20,51, según el habitual relevamiento del BCRA, lo que supone volver a colocarse sobre el rango de los $ 20,50.

Al cierre del día se conoció que la venta oficial resultó de US$ 214 millones, cifra que supone el 25% de las divisas operadas en el mercado de contado en la jornada de ayer.

El BCRA resignó temporalmente su política de flotación del dólar por la marcada aceleración que tuvo la inflación en los últimos meses. Fue cuando decidió sumar otro instrumento a la tasa de interés, que había sido su única arma hasta aquí en esta batalla y con alcances recortados por el bajo nivel de bancarización que tiene el país, y reforzar la apuesta apelando al "ancla cambiaria".

Ese plan lo comenzó a ejecutar el 5 de marzo y lo obligó a vender reservas por US$ 2466 millones en 17 de las 33 ruedas cambiarias registradas desde entonces.