Vertedero San Javier: mirá cómo es el lugar donde encontraron un cuerpo

En medio de una posible escena de un crimen, recuperadores ingresaban sin restricciones mientras la Policía ofrecía una pasiva guardia.

18 May 2018
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FOTO LA GACETA

Los peritos del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) y la Policía trabajan para determinar cómo llegó hasta el vertedero San Javier el hombre que esta mañana fue arrollado por una máquina topado.

La víctima aún no fue identificada porque al momento del hallazgo no tenía consigo ninguna documentación. Lo cierto es que todo ocurrió pasadas las 7 cuando los trabajadores encontraron el cadáver en la zona del relleno.

Incrustado entre las casas del barrio Primera Junta, el acceso a pie o en vehículo es para nada dificultoso. De hecho una vecina contó en la transmisión de Facebook Live de LA GACETA que habitualmente concurre hasta allí y busca entre los residuos cualquier objeto que pueda ser de uso en su casa.

La mujer dijo que a veces hay presencia policial en la zona y otras tantas el camino pareciera estar liberado a quien desee ingresar por su cuenta. De hecho esta es una de las versiones que deberán descifrar los investigadores, si se trata de un hombre que había ingresado al Vertedero y se habría quedado dormido.

Otra versión es que podría tratarse de un cuerpo que fue encontrado hoy, pero que estaba en el lugar hacía tiempo. Trabajadores consultados por este medio señalaron que no se trataría de un compañero que habría sido arrollado accidentalmente por la máquina.

El caso quedó a cargo del fiscal penal 4 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas.

Marginalidad y poca custodia policial


Mientras de un lado trabajan los peritos e investigadores, los habituales recuperadores de residuos continuaban ingresando al lugar, tomando o dejando lo que encontraban al paso.

En el lugar había varios actores y cada uno se movía con libertad mientras la Policía solo miraba, con cierta pasividad en una posible escena de un crimen.

El lugar es un foco de infección con contenedores de residuos al aire libre, con personas que se suben a ellos sin guantes ni protección y los escarban. Al lado de ellos juegan perros, la mayoría con bajo peso y de fondo las carpas que simulan ser casas cuyas propiedades se demarcan por lonas que delimitan los terrenos.

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