Una mujer optó por cambiarle el nombre a su hijo, por un tatuaje mal hecho

Es más fácil cambiar de nombre que de tatuaje. A esta conclusión llegó una madre sueca que decidió entintarse la piel motivada por el amor a sus hijos.

Una vez que se dio el valor, recurrió con un 'profesional' con buena experiencia para tatuarse los nombres de 'Nova' y 'Kevin' en el brazo.

“Me dibujó el diseño y no preguntó nada sobre la ortografía, así que no le di más vueltas", detalló el tatuador al periódico local Blekinge Lans Tidning.

La sorpresa llegó cuando la mujer notó que el tatuador se había equivocado y había escrito 'Kelvin' en lugar de 'Kevin'.

“Mi corazón se detuvo y pensé que me iba a desmayar", dijo la mujer.

La primera reacción de la afectada fue volver al estudio de tatuajes para pedir una explicación. Ahí el artista le dijo que no podía hacer nada más que devolverle el dinero.

 Al investigar se dio cuenta con tristeza que las sesiones de láser o cirugía eran opciones que no podía costear por lo que tras hablar con su esposo tomaron la drástica decisión de cambiarle el nombre a su pequeño.

“Nunca antes había escuchado el nombre Kelvin. Entonces, me di cuenta de que nadie más tenía este nombre. Se convirtió en único, y ahora creemos que es mejor que Kevin", explicó.

Hace unos días la mujer dio a luz a su tercera hija llamada Freja y está ansiosa por tatuarse el nombre.