Preso quiere ir al velorio de su esposa, pero no se lo permiten
Familiares de un detenido en el complejo penitenciario federal de Güemes reclaman por lo que consideran una injusticia.
El viernes 25 de mayo Pedro Arturo Agüero se enteró de la muerte de su esposa, y madre de sus dos hijos. Entre las rejas del complejo penitenciario federal de Güemes, el hombre se enteró de lo sucedido en Tartagal y desde entonces que él y su familia piden que, al menos, le den permiso para ir a despedir el cuerpo.
Virginia Soledad, madre de Arturo, dialogó con LA GACETA y explicó que ya hicieron todos los trámites que le habían pedido en Gendarmería pero no hay respuesta. La mujer no está segura de cuál es el problema. Dice que, al parecer, el juez ya dio el permiso pero que su hijo no puede ir a despedir a su esposa porque el complejo penitenciario federal de Güemes en este momento no tiene vehículo para trasladarlo. “El cuerpo está en un depósito, esperando que venga a despedirlo”, dijo la madre de Arturo. “No sé por qué tantas vueltas. Mi hijo está desesperado”, añadió.
El hombre solo quiere ir ahí, para decir adiós.
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