Deportes y libros

En los últimos meses, la temática deportiva contó con la publicación de libros excelentes, en muchos casos escritos por periodistas o escritores de primer nivel. Biografías, recuerdos e investigaciones se volvieron una lectura adictiva.

24 Jun 2018
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Por Alejandro Duchini

PARA LA GACETA - BUENOS AIRES

La cantidad de títulos con temática deportiva publicados en los últimos doce meses ratifica que estos libros tienen nicho propio y mantienen muy buena calidad de escritura y de contenido. Tal vez se deba a la incursión de periodistas de primer nivel que al no encontrar el sitio propicio para ejercer la profesión en los medios tradicionales se vuelcan a los libros.

Luna Park - El estadio del pueblo, el ring del poder (Sudamericana), de Juan Manuel Bordón y Guido Carelli Lynch, y Monzón - la biografía definitiva (Planeta, colección Un Caño), de Carlos Irusta, fueron ejemplos de excelente material. El de Bordón-Lynch es un exhaustivo repaso social, donde el deporte (y más que nada el boxeo) tiene un papel importante. El de Irusta, en cambio, es imperdible porque pone el ojo en uno de los deportistas más destacados y polémicos de nuestra historia. Monzón pasó de la gloria deportiva al ocaso en la cárcel y la muerte en la ruta. Irusta cuenta su vida con detalles y humaniza al boxeador. Lo hace a través del periodismo, terreno en el que da cátedra y demuestra por qué es uno de los mejores cronistas de boxeo.

En el medio hubo más títulos para recomendar. Uno de ellos es Las invasiones argentinas (Planeta), del profesor universitario Klaus Gallo, argentino que vivió en Londres. Gallo investigó y escribió sobre la historia de argentinos que, en distintas etapas, llegaron al fútbol inglés y, en algunos casos, al corazón del hincha. La época de Ardiles y Villa, en plena de Guerra de Malvinas, en 1982, es uno de los mejores tramos del libro.

Rodrigo Daskal y Verónica Moreira hicieron un gran repaso histórico y sociológico con Clubes argentinos. Debate sobre un modelo (Unsam), que repasa un tema siempre vigente; sobre todo en tiempos en que las entidades deportivas que no son de elite carecen de apoyo económico, aún cuando se trate de un servicio social. Miles de pibes, se sabe, zafaron de los peligros de la calle gracias a los clubes sin fines de lucro.

Luciano Olivera se volvió popular en 2013, cuando se viralizó un texto suyo sobre el descenso de Independiente. Se titulaba Aspirinas y caramelos y el año pasado fue la apertura del libro del mismo nombre (editado por Tusquets), compuesto por otros relatos personales que van desde el fútbol hasta la infancia y la paternidad, siempre con un tinte nostálgico.

Vidas

Las biografías de deportistas no se agotan. Mario Alberto Kempes irrumpió con El Matador (Planeta), en la que contó su vida, incluyendo su momento de máxima gloria: la obtención del Mundial 78, en el que fue figura y goleador. Es un libro interesante para conocer a un emblema de nuestro fútbol, aunque tal vez desaprovechado: la temática de aquel título en un país gobernado por la dictadura daba para explayarse más. 40 años después, es aún una herida que no cicatriza. Este año la cifra redonda seguramente será aprovechada con otros libros que aportarán a la cuestión.

Una biografía para devorar es Este soy yo (Planeta), de Claudio García. Sus memorias, que van entre lo ocurrente, los momentos graciosos y las noches de subsuelo, como la de su paso por el mundo de las drogas, están muy bien escritas. Así se logra que aquello que es dramático se lea de manera amena.

El británico Ian Hawkey investigó a fondo a Alfredo Di Stéfano (Alfredo Di Stéfano - Roca editorial). Desde sus orígenes hasta sus últimos días, permitió repasar no sólo su historia sino la del fútbol de esos años y la de una España que se enfrentaba social y políticamente a través del Real Madrid y el Barcelona. Los tiempos del dictador Franco, la prepotencia de Santiago Bernabeu y las señales que da el cuerpo para que el deportista diga adiós son algunos de los temas que tan bien describe Hawkey. Hay un detalle maravilloso: es el del recuerdo del día que el Che Guevara, que recorría Sudamérica junto a su amigo Alberto Granado, se reunió con Di Stéfano en un bar de Bogotá.

Sebastián Torok contó la vida deportiva de Juan Martín del Potro en El milagro del Potro (Ediciones B). Lo hizo a través de sus conocimientos como periodista de tenis y apeló a entrevistas con entrenadores, colegas y allegados al jugador. El tenis tuvo otra referencia: Así ganamos la Davis (Planeta), con el que Daniel Orsanic, capitán del equipo campeón en 2016, contó cómo se gestó y se consolidó su idea para obtener un trofeo tan preciado (y negado) para el deporte argentino.

Gran referente del mejor fútbol del Barcelona, y eclipsado por la figura de Lionel Messi, Andrés Iniesta también tuvo su libro de memorias, como se anuncia en la tapa de la excelente edición de Malpaso, una editorial que la viene rompiendo con títulos formidables que abarcan biografías de músicos (las de Bob Dylan y Paul McCartney son imperdibles) y poetas, además de ensayos y novelas. “Si crees que me conoces por lo que te han contado de mí es que no me conoces”, se anuncia en Andrés Iniesta - La jugada de mi vida, escrito por los reconocidos Ramón Besa y Marcos López.

Johan Cruyff - 14 (Planeta) es el libro que cuenta la vida del gran futbolista holandés, fallecido el 24 de marzo de 2016. En la misma línea deportiva se agrega la colección Planeta - Un caño, que además del mencionado de Monzón sumó Una historia del fútbol, de Pedro Saborido, y 22 locos, que son historias de futbolistas que se destacaron, además, por su comportamiento extravagante dentro y fuera de las canchas. La revista Un caño, ejemplo de buen periodismo, es aval suficiente para sumergirse en la lectura de estos materiales.

Tres años de investigación les llevó a Cune Molinero y Alejandro Turner Atlas de camisetas (Planeta), donde dan cuenta de la historia de los colores de los equipos de fútbol. Abundan los mitos y no faltan detalles mínimos pero que hacen interesante su lectura. Ideal para amantes de la historia.

El boxeo tuvo una rareza espectacular. Se titula Tangolibro Boxing Club (Planeta) y refleja entrevistas radiales que Osvaldo Príncipi y Eliseo Álvarez hicieron en el programa del mismo nombre. Gardel y Monzón en tapa. Tango, literatura, boxeo, cine y la nostalgia se agrupan en un formidable trabajo de dos amantes del boxeo.

Ediciones Al Arco, la editorial que se dedica sólo al deporte, cumple quince años. En 2017 sumó a su extenso catálogo Batata Negra y otros relatos, de Ariel Prat; Tecé - Ocho décadas de fierros en 80 episodios, de Pablo Vignone; El Psicólogo del Club, de Germán Diorio; Peronismo y deporte, de Osvaldo Jara; y el gran Jesse Owens y la conexión argentina, del periodista y especialista en atletismo Luis Vinker. “Al Arco es un espacio para que colegas y escritores puedan desplegar su creatividad y talento que, a menudo, no pueden realizar en los medios en los que se ganan la vida”, me dice uno de sus directores, Marcos Cezer, sobre la editorial que fundó junto a su colega Julio Boccalatte. Para este año planean su Tercer Concurso Nacional de Cuentos de Fútbol Roberto Santoro y publicar al menos tres libros: una biografía de Miguel Brindisi escrita por el periodista Rodolfo Chisleanschi; Generación Lio, en el que Héctor Laurada y Julio Martínez repasarán la carrera de Messi desde 2005, en el Mundial juvenil de Holanda, hasta la fecha; y un tercer título sobre el fenómeno de los maratones, escrito por Damián Cáceres. Además reeditarán el clásico de Gustavo Veiga Deportes, desaparecidos y dictadura.

Hay dos trabajos que no tienen que ver con la literatura deportiva pero la reflejan. Uno es Los Monos (Sudamericana), en el que los periodistas Germán de los Santos y Hernán Lascano cuentan cómo se gestó y cayó la banda narco que mataba, extorsionaba y atemorizaba a Rosario. Sus intentos por manejar el negocio de la droga en las barras de Newell’s y Central, sus participaciones en ataques contra sus líderes y hasta sus inversiones en pases de jugadores vuelven apasionante el trabajo. En El salto de papá (Planeta) el periodista Martín Sivak cuenta su dolor ante el suicidio de su padre, el empresario Osvaldo Sivak. Aparece mucho de Independiente, el club que los unió durante la época dorada, la de los años 80. El fútbol es una herramienta de unión entre padres e hijos. En este caso, se trató de una herramienta muy sólida. Los futboleros, y particularmente los hinchas del Rojo, encontrarán en estas páginas un buen motivo para emocionarse.

Y en referencia al club de Avellaneda, 2017 cerró con dos libros sobre su historia. Uno es El partido Rojo (Planeta), en el que Claudio Gómez, periodista e hincha, recrea la mayor hazaña del fútbol argentino, ocurrida en el enero de 1978, hace cuarenta años. Esa noche Independiente, con tres jugadores menos y un iluminado Bochini, empató un partido perdido y se quedó con el título. Gómez recuerda no sólo esa final, sino que indaga en el clima social de la época y cuenta por qué los dirigentes de uno y otro equipo se jugaban más que un campeonato Nacional. A Julio Grondona, presidente del Rojo, el torneo le sirvió para llegar a la presidencia de la AFA. El mismo tema también les interesó a los periodistas Jorge Barraza, Mauro Cunto y Diego Perri. Muy bien lo contaron en Orgullo Nacional - La mayor hazaña de todos los tiempos, publicado en una edición propia, lo que enaltece la investigación. Fotos, recortes, entrevistas y opiniones resaltan el recuerdo.

Saldando una deuda

Pero 2017 tuvo un broche de oro con la publicación de Cerrado por fútbol (Siglo XXI), libro póstumo de Eduardo Galeano compuesto por textos inéditos y otros ya conocidos por su legión de lectores. Hay hallazgos más que interesantes. No es menor el placer de releer viejas entrevistas, como la que le hizo a Pelé, y notas al pie que demuestran la pasión que el escritor uruguayo sentía por el fútbol. El de Galeano es un imperdible en la temática. Es que la literatura deportiva es tan humana como una novela o un cuento de García Márquez o Charles Bukowski. Porque, como dijo Galeano a El Gráfico en una de las entrevistas que se rescatan, “el fútbol es el espejo del mundo y en mis libros yo me ocupo de la realidad (...) El fútbol es una parte fundamental de la realidad, siempre me pareció muy indignante que la historia oficial ignorara esa parte de la memoria colectiva que es el fútbol en países como los nuestros, como el tuyo y como el mío. Los libros de historia del siglo XX nunca lo mencionan, jamás, no existe; y ha sido fundamental para la gente de carne y hueso. ¿Cómo que no existe?”.

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Alejandro Duchini - Periodista.

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