Qué dejó el último capítulo de la serie de Luis Miguel

Ayer terminó la primera temporada de "Luis Miguel, la serie", la ficción que atrapó a la audiencia de Netflix y que activó el interés masivo por la vida del Rey Sol, que está marcada por un padre inescrupuloso y manipulador y una madre misteriosamente desaparecida.  

Está última entrega se sitúa en dos momentos trascendentales en la vida del cantante: la desaparición de su mamá en 1986 y la muerte de su padre, Luis Rey, en el 92. Dio algunas certezas pero también muchas dudas, en especial entorno a Marcela. Y, por supuesto, dejó al público con ganas de más aunque todavía no está confirmada la segunda temporada. 

En el capítulo Nº13, Luis Miguel vive el éxito de su disco de boleros "Romance" mientras decide conocer a su pequeña hija (hasta entonces se negaba a reconocerla) y a nacionalizarse mexicano. En plena gira por Latinoamérica y en crisis con su novia Erica, el músico se entera que su papá estaba a punto de morir en España. 

En el medio, la serie retrocede en el tiempo hacia 1986 cuando Luis Miguel adolescente gana un Grammy y viaja a Chile para cantar en el Festival de Viña del Mar. Paralelamente, Marcela viaja a Madrid a verlo sin saber que su hijo estaba de viaje. Cuando ella llega a la casa familiar se encuentra sólo con Luis Rey, entra a la vivienda con su hijo Sergio en brazos y desde ese momento nunca más se supo de su paradero. 

Tras enterarse que su padre estaba grave, el Rey Sol viaja a Madrid para verlo y preguntarle sobre su mamá. Logran hablar pero Luis Rey se niega a contarle la verdad. "Tu sabes donde está", llegó a decirle minutos antes de morir.