Ante la advertencia del secuestro de vehículos y la intervención policial, remiseros suspenden la protesta de hoy

Sin embargo aseguran que la decisión fue tomada "por ahora" mientras avanzan las negociaciones con la provincia, el municipio y legisladores. Cuestionan el "abuso" de agencieron y piden la reconversión a taxis.

28 Ago 2018
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FOTO LA GACETA

Luego de que un fiscal ordenó la intervención de la Policía si hay nuevos cortes e incidentes, la Unión de Conductores de Remises suspendió la protesta que estaba prevista para hoy, pero aseguran que continuarán los reclamos contra las agencias y el pedido que desaparezcan los remises y la reconversión a taxis.

A través de un comunicado, el sindicato expresó que anoche, y tras intensas negociaciones con el Gobierno, la Municipalidad, diputados y concejales, se decidió levantar la manifestación que tenía lugar hoy, una vez más, en el centro de la ciudad.

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Los trabajadores del volante reclaman los "abusos" de agencieros por el pago de la "diaria", una suma de dinero promedio de $350, que al mes puede ascender a las $9.800, solo para poder trabajar.

En el comunicado los choferes advierten que solo "por ahora" postergan los cortes de calles en la Capital mientras aguardan las intervenciones del Ministerio de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos, la Cámara de Diputados, Concejo Deliberante y la Defensoría del Pueblo.

Además de cuestionar el cobro de la "diaria" aseguran que el camino más viable es la eliminación de los remises y la reconversión a taxis. En ese sentido indicaron que, en caso de prosperar el pedido, los vehículos deberían volver a los clásicos colores negro y amarillo, abandonando el bordó y negro.

Cabe recordar que la semana pasada llevaron adelante una medida de fuerza cortando el tránsito en la avenida San Martín hacia calle Islas Malvinas. La protesta duró alrededor de 11 horas con cortes y desvíos del sistema masivo de pasajeros y autos particulares, ocasionando un verdadero caos. Es por esto que ayer el fiscal penal 6, Horacio Córdoba, se reunió con efectivos policiales y les recordó las facultades otorgadas en el Código Procesal Penal de la provincia, que obligan a los policías a tomar intervención.

La semana pasada los remiseros realizaron una fuerte protesta en el microcentro de la capital salteña. Mientras una investigación penal sigue abierta por esa manifestación, hoy un fiscal se reunió con distintos jefes de la policía para analizar los pasos a seguir frente a posibles incidentes con remiseros. Secuestro de vehículos e incluso detenciones podrían ser algunas de las medidas derivadas de la facultad que el Código Procesal Penal otorga a la Policía.

El fiscal penal 6, Horacio Córdoba, mantuvo una reunión con jefes policiales vinculados con el área de seguridad de la Policía de la Provincia. Córdoba recordó a los funcionarios las facultades otorgadas por el Código Procesal Penal de la Provincia, las que obligan a los policías a tomar acciones concretas a fin de hacer cesar el delito.

En ese encuentro Córdoba citó el artículo 238 de la norma, que establece bajo lo siguiente: “los funcionarios y agentes de la policía que tomaren conocimiento de un delito de acción pública, deberán realizar inmediatamente los actos urgentes y necesarios para impedir que los hechos cometidos sean llevados a consecuencias ulteriores y asegurar los elementos de prueba que ayuden al esclarecimiento del hecho y a la individualización o aprehensión de sus autores y lo informarán al Fiscal inmediatamente después de su primera intervención, continuando la investigación bajo su control y dirección.”.

La fiscalía dispuso esta reunión a fin de dejar claro el accionar policial frente a nuevos incidentes que podría ocurrir, tanto en torno a reclamos de este sector de remiseros u otros sectores o grupos de personas que puedan incurrir en la comisión de delitos de acción pública.

En este marco, no se descarta entonces la posibilidad que se lleve adelante el secuestro de los vehículos e incluso detenciones, las que deberán ser informadas posteriormente a la fiscalía con competencia, sin necesidad de esperar de esta una disposición formal ante la posible comisión de un delito.


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