Un diario de Finlandia destacó a un joven salteño que busca “sacudir su patria conservadora”

Enzo Veleizán vive con su madre y su hermanito en las afueras de Salta. Desde hace un tiempo, narra sus experiencias como columnista en el programa sobre problemáticas y derechos de la niñez "La tribu entera", los sábados a las 8, por Cadena Máxima (Fm 106.7)

“La ruptura de roles sexuales no es fácil aquí en la periferia argentina. Ubicado cerca de la frontera con Bolivia, Salta es conocida por su profundo catolicismo y sus valores del viejo mundo.  Caminando por el centro histórico de Salta, hay iglesias, monasterios, otros edificios religiosos y colegios católicos. En las escuelas, las actitudes centenarias cambian de generación en generación. Existe una cultura machista que enfatiza los roles tradicionales de hombres y mujeres, donde las mujeres son débiles en comparación con los hombres”, dice la publicación finlandesa que realizó en Salta y Argentina una serie de notas con jóvenes que se destacan por sus actividades.

La publicación narra a la historia de Enzo y cómo fue llegando a pensar como lo hace hoy: “Al pequeño Veleizán no le importaba el fútbol como a otros niños. Lo estaba pasando mejor con las chicas. "Otro niño me dijo ´niña´ en la escuela porque siempre jugaba con las niñas”, recuerda Veleizán, pero enfatiza que en realidad no sufre de acoso escolar”.

“En Salta, muchos niños se levantan para pensar que llorar es un signo de debilidad. Los padres de Enzo también se han preparado para examinar sus propias actitudes con el crecimiento de su hijo”.

“Las personas apoyan los pensamientos del siglo pasado aquí y el catolicismo está presente en todas las áreas de la vida. Lucho para que la gente abra la mente y despierte al presente”, dice Enzo.

 “En el pasado mi mamá me inculcó valores tradicionales importantes, pero ahora he sacudido su mundo, por ejemplo, mediante el apoyo al derecho al aborto o pintándome las uñas negro”, dice Veleizán.

Si bien de chico estuvo involucrado en las actividades de la iglesia hoy en día la critica y apoya la separación de la iglesia y el estado. “Ha sido difícil para mi madre aceptar mis pensamientos, pero al final siempre hemos encontrado un lado común”, dice.

“Veleizán, quiere sacudir su patria conservadora, la ciudad norteamericana de Salta”, dice el diario de Finlandia.

“Enzo Veleizán comenzó a militar a favor del aborto cuando la campaña recién empezaba, antes de que decenas de miles de mujeres jóvenes, y entre ellas muchos hombres jóvenes, marcharan por toda Argentina”, explica la publicación.

“La campaña también se extendió a Salta, donde Veleizán se convirtió rápidamente en líder de un grupo de estudiantes de aborto. A pesar de que la legislación argentina sobre el aborto no ha sido alterada , los derechos del aborto se están discutiendo en forma regular”.

IMAGEN DE JUAN LEANDRO HERRERA PARA https://yle.fi

“La audaz presencia de Valeizán  lo ha convertido en un creador de tendencias para sacudir un saludo a un movimiento joven y feminista dominado por los jóvenes.

"De chico quería ser conocido y ser genial, pero ya no es importante buscar popularidad", dijo Veleizán y contó que, a los 11 años, asistió a un concurso local de canto infantil en Salta Canta, donde fue seleccionado entre los 25 primeros de los 500 participantes.

Sus amigos más cercanos son sus compañeros del IEM de la Universidad Nacional de Salta, además de sus compañeros de teatro del Taller Sensaciones. "Por el teatro me atrevo a ser como soy hoy", dijo con orgullo.

IMAGEN DE JUAN LEANDRO HERRERA PARA https://yle.fi

Los domingos en familia

“Cuando los familiares se reúnen de manera tradicional los domingos en el comedor, muchas veces los jóvenes guardan silencio. “ No quiero estropear la atmósfera y causar problemas. Respeto las opiniones de los demás y, por otro lado, saben lo que pienso sobre la igualdad de género o el Estado y la Iglesia”, señala Veleizán. Sin embargo, mantiene su bandera siempre alta y defiende sus propios puntos de vista para todos”.

“Veleizán cree que las actitudes anticuadas de muchas personas se deben a su pereza e intolerancia para buscar nuevos conocimientos y comprensiones. El mayor problema es que la gente tiene miedo. Temen mirar las cosas desde otro punto de vista y comportarse mal cuando ven algo diferente. Y a esto le sigue la discriminación”, suspira Veleizán.