Un perro ayudó a un niño con vitíligo a superar su grave depresión

Hace dos años que a Carter Blanchard fue diagnosticado con vitiligo, una enfermedad degenerativa de la piel a través de la cual se va perdiendo pigmentación y van apareciendo manchas blanquecinas por todo el cuerpo.

Con solo seis años, la enfermedad le causó problemas de seguridad y autoestima. Su madre, Stephanie Adcock, decidió buscar ayuda cuando su hijo le confesó que odiaba su cara y cómo se veía.

Stephanie al buscar soluciones en Internet encontró la fotografía de un perro llamado Rowdy, un labrador negro de 13 años al que también habían diagnosticado vitíligo el mismo año que a Carter.

A pesar de que la madre quería que su hijo conociera al animal había dos grandes obstáculos que lo impedían: la distancia y el dinero. Los dueños del perro vivían en Oregón y Stephanie no podía hacerse cargo económicamente del viaje.

Lo sorprendente de esta historia es el milagro que a Carter le ocurrió. Alguien se enteró de la historia y de forma anónima donó los 5000 dólares que costaba el viaje. Madre e hijo viajaron juntos y cuando llegaron a su destino y Carter conoció a Rowdy cambiando su mundo para siempre.

A partir de ese momento, el pequeño ya no se sintió distinto y cuando volvió al colegio, lo hizo renovado de energía positiva. Actualmente, la madre de Carter y la dueña de Rowdy están buscando la forma de que ambos puedan verse a menudo y desde aquí esperamos que lo logren.

Fuente: La Nación y Clarín