Salta: caminaron 160 km para pedir agua potable

Esta mañana el centro salteño recibió a los vecinos de San Antonio de los Cobres tras caminar más de 160 km para repudiar la lenta realización del acueducto El Acay. Desde Aguas del Norte se comprometieron a agilizar la obra sin embargo para la comunidad “es la misma promesa de todos los años”.

Se trata de una lucha que lleva más de 30 años pero que estalló en noviembre del año pasado cuando los vecinos encontraron microorganismos extraños en el agua. La obra destinada reemplazar la fuente de agua potable actual está a cargo de Aguas del Norte y se encuentra realizándose desde hace casi cuatro años.

Después de meses de manifestaciones y cortes de ruta en San Antonio, más de veinte personas decidieron caminar hasta  el centro salteño para visibilizar la situación. “La idea no es venir a pelearnos con los políticos sino visibilizar esta problemática: hay una inversión de 28 millones de pesos y una obra que no está finalizada”, aseguró Reina Ferril a LA GACETA.

Miembros de la comunidad de San Antonio de los Cobres en la plazoleta 4 siglos. LA GACETA

Lucio Paz Posse, Presidente del directorio Aguas del Norte, concurrió al lugar junto con algunos vecinos e informó que se mandó material para completar el 20% restante.  Sin embargo, uno de los manifestantes aseguró que  Posse desconocía el conflicto interno sobre el mantenimiento y la obra. “Se detectó que el acueducto no se completó ni siquiera en un 70% ya que el prestatario abandono la obra, en cuatro años tendría que haberse terminado”, dijo.

De acuerdo al informe “Arsénico en agua” realizado por el CONICET, Salta entra dentro de una de las provincias más afectadas con las más altas concentraciones de arsénico en sus aguas. El estudió contempla a San Antonio de los Cobres y pone énfasis en los efectos sobre la salud humana.

Ferril aseguró que sufren consecuencias como diarrea, vómito y todo tipo de alergias en la piel debido a que la fuente de agua actual tiene residuos que provienen de una minera abandonada.  En diálogo con LA GACETA se informó además el caso de dos niños con enfermedades diagnosticadas como producto de la contaminación.

Por último, miembros de la comunidad repudiaron la represión que sufrieron al manifestarse en sus calles y durante su caminata a la ciudad. Contaron que el 10 de Enero más de 30 personas fueron detenidas por infantería tras cortar la ruta nacional acusadas de cortar el libre tránsito. Aseguraron para finalizar, que debido a este incidente muchos de los pobladores no se sumaron a esta protesta por miedo.