Elián del Mestre, el amor y cómo se ingresa a un estado de hiperpoesía

Por Mario Flores (*)

Elián del Mestre es escritor y editor de Paraná. Coordina clínicas y talleres literarios. Participó en el programa nacional Escena Pública del Ministerio de Cultura de la Nación (2017). Fue ganador del premio FEICAC (2018). Trabaja como abogado. Publicó “El libro que no fue jueves” (2010), “Pulóver” (2014), “Así conocí una Rom” (2017), “Sergio” (2017), “Tal vez mañana mariposas” (2017), “Dame la mochila” (2018) y “Después de los pájaros” (2018).

Reseña de leyendo “Como si fuera de día”, de Elián del Mestre

1)"Como si fuera de día" puede leerse como una selección de mensajes donde el paisaje se vive en primera persona ¿Cuánto hay de autorreferencia y cuánto hay de ficción en esa primera persona?

Justamente, <Como si fuera de día> es la verdad. La ficción no existe, lo escribí enamorado, y cuando me enamoro veo la verdad del mundo: las cosas importantes, no las otras. Poder detenerse y mirar y decir. El libro cuenta una historia de amor increíble, diferente: Conocí a Emilia en Cuba, es ecuatoriana y vive en Estados Unidos. Coincidimos en Cuba unos días. Después, al mes, nos encontramos en Brasil y estuvimos viajando mucho tiempo juntos. Ella es música y es el amor. Desde ahí hubo una historia que determinó lo que tenía que decir del mundo, de ese mundo de aquél momento.  Así nació el libro, fue un libro de ilusión y de espera. Hasta volver a vernos después de habernos visto. Fue una linda historia de amor.

2) El libro fue publicado gracias al apoyo del FEICAC ¿cómo percibís actualmente la presencia de apoyos institucionales en el proceso de publicación y edición de obras contemporáneas?

Me parece fundamental. Es necesario y deseable que el estado estimule, fomente, e invierta en el desarrollo y difusión de todo tipo de arte. Porque es arte es la traducción de lo intrínseco de la sociedad de ese tiempo, es la manifestación de lo que la gente siente y piensa, es un registro. Debe ser una política pública permanente y en aumento. Pero está claro que hay un grupo de gente que no le interesa conocer lo que la sociedad dice, el registro de la historia social, no le conviene la conciencia de los pueblos. Lo ven como un gasto, siempre es lo primero donde se recorta, ahí es donde se puede ajustar. El arte es lo prescindible para alguna gente.  Hoy el panorama para publicar está muy difícil. Muchos proyectos artísticos se materializan gracias a aportes del estado, y eso, bueno, es deseable: artistas haciendo arte.

3) Todos los poemas del libro son luminosos pero ¿Cómo se hace para escribir el amor sin caer en el romanticismo estereotípico?

Vivirlo, vivirlo así, naturalmente.  No le escribo al amor, ni escribo sobre o del amor sino viendo lo que el amor me hace ver, sintiendo, porque activa otra sensorialidad, otro estado del alma.  Me detengo en cosas en las que no me detenía, me pongo más poeta que de costumbre cuando me enamoro.

4) El paisaje natural, el mundo físico y lo sensorial están siempre en el centro de los poemas ¿Cómo percibís la lectura de este libro en relación con publicaciones anteriores?

Lo que te decía. Cuando caigo en estado de amor me detengo mucho en lo que me rodea, voy en una cámara lenta mirando, y anotando, en un estado de hiperpoesía que envuelve.  Me parece que alguien que lo lea puede llegar a notar eso. Si bien en todos mis libros aparece, los libros tratan de otra cosa, vienen a contar algo diferente. Salvo <Tal vez mañana mariposas> que es un manifiesto individual del amor, donde se puede ver un proceso de deconstrucción de algunas cosas. <Como si fuera de día> es una historia de amor particular, signada por la distancia de pieles.

Escritor (*)