Tucumán: por un detalle físico identificaron al supuesto autor del crimen de Benjamín

El acusado, hermano del abuelo del pequeño de cuatro años, fue detenido después de declarar en tribunales. Un testigo de identidad reservada aportó datos clave.

16 Ago 2019
2

ALLANAMIENTOS. La Policía salió durante la noche de ayer a realizar procedimientos para esclarecer el caso.

TUCUMÁN.- Claudio Argañaraz, de 37 años, hermano del abuelastro de Benjamín Amaya, se transformó en el principal sospechoso de haber cometido el crimen del menor. El acusado fue aprehendido ayer, después de haber sido interrogado en tribunales por la fiscala Adriana Giannoni.

La causa tuvo este inesperado desenlace, tras que un testigo aportara un dato clave. Dijo que el jueves 8 se cruzó con un joven, al que no conocía, con un niño que podría haber sido “Benjamín”. La persona señaló que el encuentro se produjo cerca de las 16, hora en la que se estimaba que se había producido el homicidio, ya que el pequeño salió de su casa después de las 15 y fue encontrado pasadas las 17, por familiares y niños que colaboraban en la búsqueda.

El informante que brindó el dato, que será declarado testigo de identidad reservada por la Justicia, dio un detalle físico del sospechoso que posibilitó la rápida identificación. Sus dichos, además, coincidieron con algunas descripciones que habían realizado anteriormente otros vecinos, pero se diferenciaban con el aspecto físico. Los testigos dijeron que era un adolescente por su tamaño y contextura física. La persona que brindó los detalles clave expresó que se trataba de un mayor de edad.

El sospechoso, por las versiones que recogieron, se entrevistó con los policías que durante varios días recorrieron el humilde caserío. Negó terminantemente haber sido el autor del hecho, explicó que ese día ni lo había visto a Benjamín y que, inclusive, habría participado en la búsqueda.

Ayer, al reunir varios indicios en su contra, fue citado a declarar en Tribunales. Insistió en su versión, pero habría caído en varias contradicciones. Por ello, se solicitó su detención, planteo que fue aceptado por un juez. Al cierre de esta edición, personal de Homicidios e investigadores del Ministerio Público Fiscal (MPF) realizaban distintos operativos en el barrio para tratar de encontrar pruebas que podrían reforzar la acusación.

Por el momento, no se informó si el detenido tiene antecedentes penales. Sí trascendió que es analfabeto y que era conocido en El Colmenar. Es uno de los tantos hermanos que tiene Francisco Adán Peñalva, el abuelastro de la víctima, que viven en el barrio, a cuadras de la casa.

Varias dudas

Con la detención del sospechoso se dio un importante paso, pero aún quedan esclarecer varios puntos. El más importante es determinar el móvil. La hipótesis más fuerte sigue siendo que el atacante captó mediante engaños al niño y lo llevó a un lugar alejado para abusar de él. Como no pudo concretar el ataque sexual, decidió ahorcarlo con un cable. Sin embargo, las pesquisas continuarán indagando en el entorno familiar para determinar si el homicidio no fue generado por otra situación particular, como una venganza o un ajuste de cuenta.

Los investigadores también están tratando de determinar qué motivó un manto de silencio en el caso. Tal como lo venía publicando en LA GACETA, a los días de haberse producido el crimen, los vecinos le pedían a los investigadores que indagarán en el entorno familiar de la víctima, pero no aportaron más datos. Hasta los que se animaron a brindar algunos detalles sobre el acusado dieron algunas pistas que no fueron del todo claras y que hasta podrían haber llegado a desviar la investigación.

Argañaraz no concurrió ayer a tribunales solo. Estuvo acompañado por una docena de parientes que lo esperaron durante horas que terminara de declarar. Los policías del lugar fueron los encargados de transmitirle la novedad. Se marcharon en silencio, con rostros de sorpresa y sin provocar incidentes.

De manera paralela, continuarán investigando si el ataque que sufrió el personal de Homicidios el martes está vinculado al crimen. Por el atentado, fueron detenidas dos personas: un menor de eda y un mayor. El adulto, según confirmaron fuentes judiciales, negó haber participado en el hecho; mientras que el adolescente habría reconocido que estuvo en el lugar, pero que no había sido el autor.

“El Menor”, como es conocido en el barrio, de 17 años, fue alojado en el Instituto Roca. Sólo fue vinculado al ataque a los policías, aunque no descartan que la fiscala Giannoni lo cite para interrogarlo por el homicidio de “Benja”. Ayer declaró y habría reconocido haber sido el autor de los disparos que pusieron en peligro la vida de los uniformados.

“Menor”, tiene 17 años, y fue detenidos varias veces por diferentes robos, aunque se especializaba en sustraer armas. También estuvo mencionado en el crimen de un rondín, pero nunca lograron probar su participación. En el barrio, según confiaron fuentes policiales, todos los conocen por ser “cabecita e’ hierro”, es decir un joven decidido a hacer cualquier cosa para ganarse su paga, sin importar qué es lo que tenga que hacer.

El miércoles, luego de haber realizado allanamientos a la mañana, a siete personas se le extrajeron muestras de sangre y de pelos para realizar futuras comparaciones genéticas. Este grupo, formado en su gran mayoría por menores de edad, fue mencionado por los testigos que también apuntaron a Argañaraz.

ALLANAMIENTOS. La Policía salió durante la noche de ayer a realizar procedimientos para esclarecer el caso.

Los procedimientos policiales continuaron durante la noche de ayer.

Comentarios