La visita de Macri en la festividad del Milagro genera cruces en la Iglesia y en políticos

Tal como lo adelantó ayer LA GACETA, Mauricio Macri llega este domingo a Salta para participar de las festividades en honor al Señor y la Virgen del Milagro. Si bien aún no está confirmado que realice la procesión, sí está en la agenda presidencial que participe de una misa, a las 10 de la mañana, en la Catedral Basílica.

La visita dejó en evidencia una grieta, en la Iglesia local.

El padre Raúl Méndez expresó en un comunicado: “Junto con otros miembros del clero manifiesto mi oposición a tan inoportuna visita. En estas circunstancias su presencia será una provocación, que provocará la lógica reacción. No tiene sentido venir a empañar la fiesta de los salteños. Lo más razonable es que suspenda semejante previsión y nos deje tranquilos. Más bien que se ocupe de resolver los graves problemas en que embarcó al país".

Horas después el Monseñor MarioCargnello hizo una declaración pública y aseguró que él había invitado al mandatario el viernes. "Su presencia nos honraría, por eso me atrevo a invitarlo", dijo en una breve misiva protocolar. Lo curioso es que hasta hoy al mediodía, en la Catedral Basílica aún no tenían confirmación de la visita presidencial.

El gobernador Juan Manuel Urtubey  y candidato a vicepresidente de Consenso Federal dijo a La Nación que no mantendrá ninguna reunión con el presidente, porque "no dan los tiempos".

Urtubey dijo, además, que no teme que la fiesta religiosa se politice: "Tiene un volumen y una tradición que nos excede a todos. No modifica en nada quiénes vamos", sostuvo.

El intendente Gustavo Sáenz no confirmó si se reunirá o no con Macri. Sí fue llamativo, el viernes, la aparición de unos carteles, en los que aparecían las fotos del jefe comunal, junto al intendente, con la frase “Bienvenido presidente” y la leyenda “Sí, se puede”. Lo curioso fue que Sáenz de desentendió de esos afiches y se los atribuyó a la oposición.

«Saben que viene mucha gente y les parece lindo eso… yo sabía que venía Cristina, no Macri», finalizó el intendente.

La llega de Macri no pasará desapercibida, al menos para el espectro político; para los peregrinos, para quienes vienen caminando desde hace una semana, será un dato anecdótico más: a ellos sólo les importa rendir homenaje a los Santos Patronos.