Un acercamiento a "La brigada antipop del norte argentino"

Fabio Martínez, escritor nacido en Tartagal, presentó su nueva novela en Salta.

09 Oct 2019
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Imagen FAcebook, Marco M. Caorlin

(*) Por Daniel Medina

Es un honor poder estar acá presentando La brigada antipop del norte argentino y no lo digo sólo porque es un gran libro. Sino porque es un gran libro de un autor fundamental para entender la nueva narrativa salteña.

No recuerdo muy bien cuándo conocí a Fabio personalmente. Sí, cuando leí la novela Los pibes suicidas. Me corrijo: Cuando leímos, debo usar la tercera persona del plural. Éramos unos jóvenes que todavía estudiábamos Letras y queríamos ser escritores. Los poetas ya habían publicado y mostraban su talento; los narradores sólo éramos promesas. Algunos quizá ya teníamos uno que otro cuento, meros borradores. Recuerdo que cuando el libro cayó en mis manos todavía discutíamos mucho sobre cómo debía ser nuestra literatura. Al igual que los personajes de La brigada antipop del norte argentino, no sabíamos muy bien quiénes éramos, pero sí quiénes no queríamos ser: odiábamos el paisaje, la quietud provinciana, odiábamos una literatura que no deba cuenta del presente. Fabio, para ese entonces, ya sabía qué quería hacer. Y lo había dejado bien en claro en sus libros. Todavía recuerdo los chats entusiastas, enérgicos, llenos de envidia, qué duda cabe, en que debatimos su novela, que habíamos devorado uno o dos días antes. Los pibes suicidas fue, para mí, la prueba concreta de que otra literatura era posible.

Los buenos escritores no quieren repetirse a sí mismos. La brigada anti pop muestra una nueva búsqueda en la literatura de Fabio. Yo creo que Fabio fue tarantinesco y realista, en el sentido más carveriano de la palabra, en su novela Los pibes suicidas y en Despiértame cuando sea de noche; después vino Los cuentos de los Dioses del fuego, que están atravesados por mojones fantásticos, oníricos, davidlyncheanos. Y ahora podemos leer La brigada anti pop del norte argentino, que es, paradójicamente, su libro más pop. Fabio muta, porque sabe que no hay nada peor que repetir fórmulas. Lo que me impresiona es que, pese a estas mutaciones, con sólo leer un par de párrafos ya sabemos que ahí está Fabio. Que se las arregla para mutar y para seguir siendo el mismo.

No quiero adelantar mucho más sobre el libro. Tampoco quiero realizar un despliegue más grande halagos al libro. Lo que yo diga, lo que una reseña diga, importa poco. Son los libros, en su soledad, los que deben batallar con sus lectores. Y creo que La brigada anti pop del norte argentino puede presentar una buena batalla.

(*) Texto leído en la presentación del libro.

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