Un Pitbull asesinó las mascotas de una vecina, ¿qué hacer con estas razas?

En zona sur de la ciudad un perro raza pitbull ingresó a un departamento atacando a la dueña y matando a sus dos mascotas. Los vecinos dijeron que el animal estaba suelto por todo el edificio, sin correa ni bozal y era de gran porte.

Pety, dueña del departamento, contó a LA GACETA que se disponía a salir de su hogar con sus mascotas, un perro y un gato, sus compañeros desde hace 19 años cuando un pitbull marrón, que estaba alterado y circulaba libre por el edificio, empujó su puerta ingresando y ocasionando la muerte de sus animales. A los mordiscones y entre gritos, los mató. 

"Reaccioné y salí corriendo a pedir ayuda a mis vecinos. Mi perro me salvó, porque de otra manera, me atacaba a mí”, dijo.

Su relato es estremecedor: “El pitbull me saltó y yo pude cubrirme la cara con la mano, pero igual llegó a golpearme. Sus dueños quisieron ofrecerme otros animales como forma de pago, eso no va a cambiar nada, nadie va a quitar la imagen que yo tengo en mi cabeza, mató a mi perro y gata que tenía hace 19 años”, agregó Pety haciendo referencia a sus animales que perdieron la vida en este episodio.

"Quiero que la gente tome conciencia sobre como cuidar estos animales, es una raza muy peligrosa y no tienen que andar en las calles sueltos"

Los vecinos contaron que llamaron a la Policía más de tres veces y que demoró en llegar y que, cuando lo hicieron, el animal ya había sido retirado por sus dueños. El detalle: luego de llevarse a su perro, habían brindado una dirección falsa y nunca los pudieron encontrar.

“No importa si mis animales eran de raza o no, eran mi compañía y no pude hacer nada para salvarlos. Quiero que la gente tome conciencia sobre como cuidar estos animales, es una raza muy peligrosa y no tienen que andar en las calles sueltos, no voy a descansar hasta que se den cuenta lo que me provocaron, por eso quiero que la gente conozca estos casos porque no es el único, hay muchos”, dijo la vecina desconsolada.

Foto ilustrativa

El American Pitbull Terrier, conocido como Pitbull, está considerado una de las razas potencialmente peligrosas, son audaces, fuertes y dominantes, en sus orígenes fueron perros usados para lidiar con toros. En Salta existe la Ordenanza Municipal N° 12139 y la Ley N° 7672, que detalla como deben ser las tenencias responsables de las mascotas consideradas peligrosas.

Según un adiestrador, la única diferencia entre las razas de perros, es el poder en la mandíbulas: “Son totalmente diferentes la de un caniche con la de un pitbull”.

“A partir de la domesticación del perro los hemos convertido en eternos adolescentes”

¿Qué debemos tener en cuenta cuando criamos a un perro?

“En mi carrera profesional muchas veces he escuchado a propietarios afirmar "mi perro no muerde", totalmente confiados. El problema es que por más que el perro nunca haya mostrado un comportamiento agresivo no implica que no pueda suceder en el futuro, bajo determinadas circunstancias que debemos prevenir. Morder es parte de la naturaleza misma del perro, así como lo es rasguñar para un gato, o discutir para una persona. Toda especie tiene lo que se denomina un etograma, el repertorio de conductas que caracteriza el comportamiento de esa especie, y la mordida es parte del etograma del can”, comentó Lisandro Verneri, adiestrador de canes.

El 70% de la conducta va a estar determinada por la educación que le demos en casa y solo el 30% es de origen innato o natural. Todo perro nace con una tendencia innata a ocupar un determinado lugar en su manada, manada que incluye a nuestra familia, ya que el perro nos ve como una especie de perro raro que anda en dos patas y vestido, básicamente nos incorporan en su vida social”, aclara Verneri, quien estudió en la UBA.

Foto gentileza Lisandro Verneri

En el ámbito doméstico, explica el profesional, es importante demostrar a los perros que sus recursos como cucha, horarios de comida y subir a sillones o camas será consentimiento del dueño y que deben bajarse inmediatamente cuando se le ordene.

Otro aspecto importante que remarcó el adiestrador es el de la neotenia, así se denomina a las características comportamentales “infanto juvenil” en el perro durante el periodo adulto, principalmente el comportamiento lúdico. “El comportamiento lúdico,  o sea el juego, es una preparación para la vida adulta ¿por qué nuestros perros continúan siendo juguetones cuando crecen? Porque a partir de la domesticación del perro los hemos convertido en eternos adolescentes”, subrayó.

“Se debe tener conciencia de cómo es criar un animal”

Formas de agresión, ¿Cómo evitarlas?

“Todos los animales son potencialmente peligrosos inclusive el humano, todo viene de la crianza. Cuando están criados en un ambiente de armonía, paz, convivencia con otros animales se nota la diferencia a otro que está criado en un ambiente con órdenes de atacar. A la gente les gusta mucho estas razas, pero si uno no sabe cuidar a ese animal generan consecuencias malas, hay que criarlos bien con mucho cariño, amor y disciplina”, dijo el veterinario Cristian Jack Bee Mill a LA GACETA. Además agregó que no se debe maltratar a los animales porque eso genera violencia, y que toda educación comienza en casa, “se debe tener conciencia de cómo es criar un animal”.

FOTO FACEBOOK / NoaCan Adiestramiento

Existen dos formas de agresión en el perro: la agresión de presa, vinculada al juego y la agresión jerárquica. En la primera, por ejemplo, los perros persiguen a bicicletas en la esquina. Para evitar esto se debe incentivar a que los perros descarguen su energía sobre la pelota, el mordillo o cualquier otro juguete.

La segunda forma, la agresión jerárquica a sus compañeros de manada y seres humanos, está destinada a establecer el control sobre los recursos.  Pueden controlarse con ejercicios de obediencia, socializando al perro desde chico con otros animales y enriqueciendo su vida con la mayor cantidad de experiencias posibles. En caso de que algo este mal, o el perro tenga algún antecedente de agresión, se debe consultar a un profesional.

Ley sobre registro de propietarios de perros potencialmente peligrosos

Desde el 2011, en Salta se sancionó la Ley N° 7672, que condena mediante el artículo 58 de la Ley N° 7135 a todo aquel que no cumpla con los reglamentos necesarios sobre cómo debe ser la tenencia de perros potencialmente peligrosos.

“Será sancionado con arresto de hasta quince (15) días o multa de hasta quince (15) días, el que tuviere un animal que ofreciere peligro de ataque a las personas por su instinto o dificultad de domesticación, sin haber adoptado prudentes medidas de prevención”, detalla el artículo.

Los dueños de las mascotas deben cumplir ciertas obligaciones: inscribirlas en un registro antes de que el perro cumpla seis meses de vida; hacerlos circular con correa o cadena de menos de un metro de longitud, collar y bozal, adecuados para su raza; adoptar las medidas necesarias de seguridad en el hogar y no dejarlos nunca libres, en espacios comunes en el caso de edificios. 

Con estas normas al día, Pety seguiría disfrutando de la compañía de sus mascotas.