Los gatos blancos pueden requerir cuidados especiales

Los gatos, una de las mascotas más elegidas por los tucumanos, requieren ciertos cuidados especiales, sobre todo si se trata de los que son blancos, o con algo de pelaje blanco. Esto se debe a que esta especie es susceptible de desarrollar tumores cancerígenos.

“Los carcinomas fotoinducidos son tumores muy comunes en felinos blancos. Se juntan dos factores muy importantes en esta enfermedad, por un lado la condición genética de los gatos de pelo blanco o con partes blancas en su pelaje, y por otro el agente carcinogénico que en este caso son los rayos ultravioletas y el hábito de los gatos de tomar sol”, explicó Celeste Ratto, especialista en oncología veterinaria. Estos casos se producen en siete de cada 10 gatos blancos, según la profesional, aunque aclaró que es una cifra que responde a promedios de edad elevados: entre 10 y 12 años.

Lo mejor en estos casos siempre es consultar con un profesional veterinario que haga los estudios pertinentes. Además, los dueños deben estar atentos a cualquier lesión de su mascota. A los gatos les gusta tomar sol, pero pueden sufrir consecuencias negativas.

“Esto no es bueno para ellos, principalmente para los de piel blanca. Por eso indicamos siempre a los propietarios que ante la mínima lesión en la nariz, orejas, alrededor de los ojos, párpados y labios, consulten con su veterinario. Sobre todo si son lesiones que no se curan fácilmente a pesar del tratamiento que se le realice”, le dijo Ratto a LA GACETA.

Para darse cuenta de esto, la veterinaria explica qué efectos produce un tumor en el animal: “al principio la lesión aparece en forma de área de color rosado, quizás con algunas costras o pérdida de pelo, o puede aparecer como un arañazo en la nariz. Luego comienza a hacerse más grande, como úlceras sangrantes. Es un tumor muy invasivo, pero si es detectado a tiempo podemos obtener muy buenos resultados. Son lesiones que se extienden destruyendo el tejido de alrededor”.

Desde hace tiempo que existe la cirugía como la forma más común para tratar estos tumores y, según la especialista, aún sigue siendo la mejor opción terapéutica. Sin embargo, como se trata de lesiones en la cara del animal, los veterinarios se ven limitados por la ubicación del tumor ya que la operación resulta poco estética.

Sin cirugía

Hay otros dos tratamientos sin cirugía que también dan buenos resultados. “La primera es la electroquimioterapia, la combinación de una droga citotóxica con pulsos eléctricos en el mismo tumor, lo cual genera una biodisponibilidad casi del 100% de la droga en las células tumorales y logra la remisión completa de 28 a 35 días; la otra opción es la criocirugía, una técnica quirúrgica que emplea un agente criogénico que congela la célula a -196 grados, temperatura suficiente para lograr la muerte celular”, explica la especialista.

Por último, Ratto destacó que la forma más efectiva de cuidar que el gato sufra este tipo de patologías es evitar que pase mucho tiempo al sol, especialmente en los horarios en que este es más agresivo, entre las 12 y las 17.

Además, recomendó los mismos cuidados de cualquier mascota geronte: controlar el correcto funcionamiento de los riñones, del aparato cardiovascular, de la función hepática, etcétera.