Entrenando en casa: "Es difícil pelearle a Netflix, pero se puede"

Ha vuelto al acecho el diablito que todos los días, en algún momento, susurra al oído: “hoy no vayas a entrenar”. Ha vuelto más fuerte que antes por el frío y por el cierre de los gimnasios y clubes de entrenamiento, vigente desde el viernes pasado tras dos meses de reabiertos. Ahora el desafío es volver a juntar fuerza de voluntad, resignarse y retomar clases virtuales y rutinas en la casa.

“Durante el primer mes de la cuarentena, la gente estaba motivada y entrenó mucho. Pero después empezó a decaer y hay quienes llegaron a la reapertura de los gimnasios en muy mal estado físico. Tanto, que debimos ajustar la planificación y comenzar despacio. Y ahora, habrá que volver a entrenar en la casa y aguantar estos 15 días”, dice Alejo Ganassin, deportista y propietario de un centro de fitness.

Son pocas o ninguna las ventajas que apuntan los entrenadores respecto de hacer ejercicios en casa en relación con hacerlos en un lugar preparado a tales fines. Pero del otro lado de la vereda está otra pandemia, el sedentarismo, que será una de las consecuencias directas del aislamiento, según han coincidido especialistas de diversas disciplinas.

Todos los gimnasios y centro de entrenamiento ya comenzaron a retomar una práctica que habían implementado a la fuerza a partir de marzo, cuando debieron cerrar sus puertas por la cuarentena, que fue subir las rutinas de entrenamiento diario a sus redes sociales. Algunos también sumaron clases virtuales, con transmisiones en vivo. La recepción ha sido dispar, según evalúan los dueños de gimnasios.

Armando la rutina diaria

Un estudio de la UBA difundido a principios de agosto reveló que más de la mitad de la población no realizó ninguna actividad saludable durante el confinamiento. “Las conductas saludables permiten tolerar la cuarentena, amortiguando su impacto en el malestar psicológico. De no practicar tales conductas, podría predecirse que si el aislamiento se extiende en el tiempo, su impacto psicológico podría ser mayor”, advierte el estudio.

“No es lo ideal, pero es necesario hacer algo hasta que vuelvan los entrenamientos presenciales. Es muy difícil, estando en casa, competirle a Netflix, sobre todo en días fríos como estos últimos. Pero hay maneras de conseguirlo y de organizarse para hacer todo: ejercicios y ver series”, destaca Nicolás Centurión, entrenador y propietario de un gimnasio.

Virginia Capetta es deportista, practica trail (carrera de senderos) y además entrena en gimnasios para sostener el ritmo de su deporte. “Yo estoy acostumbrada a gastar mucha energía, entonces si no hago algo, directamente no duermo a la noche. Entonces adapté una rutina de CrossFit a mi casa, con algunas bandas, pesas y otros pocos elementos. Pero la clave no es esa: es ponerse el horario, hacerse la rutina, y tener el compromiso de que a determinada hora, se entrena”, aconseja.

“Hay que hacer todo el ritual”, recomienda Centurión. “Eso implica vestirse con la ropa deportiva, poner una música enérgica -está demostrado que favorece el entrenamiento-, tener armado un lugar específicamente para entrenar. Hay que intentar replicar toda la experiencia del gimnasio en la casa, dentro de lo que se pueda”, señaló.

En el caso de Ganassin, armó su espacio de entrenamiento en el garage de su casa. “Durante el primer mes de cuarentena entrenamos fuerte, seis días a la semana. Pero llega un momento en el que se necesita salir, moverse, cambiar de aire. Por eso mucha gente abandonó y había logrado retomar ahora. A mucha gente le costó volver, y es esa la gente que más está alquilando materiales para no perder el envión”, explicó.

Ganassin también coincide en que la clave es destinar un horario fijo al entrenamiento. “Si lo hacés ‘cuando se pueda’ no lo vas a lograr. Si estás acostumbrado a ir al gimnasio a las 20, se puede continuar con ese horario, pero en la casa. Lo importante es que esté la rutina y el tiempo destinado”, finalizó.

Mini gimnasio: cuánto cuesta alquilar barras y discos

Como ocurrió en la primera cuarentena, la mayoría de los gimnasios volvió a alquilar materiales para que los socios entrenen en casa. Las barras olímpicas rondan los $ 1.000 la quincena; las pesas rusas, $ 500; los discos, aproximadamente $ 500 por cada 10 kilos. También se pueden arrendar sogas, pelotas, cajones y otros materiales para armar un mini gimnasio temporal en casa.