A ocho meses del crimen de Castañares, inicia el juicio por “Poly”

Franco Jonathan Corvalán es juzgado por el homicidio del enfermero ultimado en su casa pocos días antes de un viaje de placer.

18 Abr 2017
2

JUICIO. Inician las audiencias por el crimen de Leopoldo Federico Núñez. FOTO TOMADA DE FACEBOOK LEOPOLDO NÚÑEZ

Ocho meses pasaron del crimen de Castañares. La noche del 31 de agosto de 2016, Leopoldo Federico “Poly” Núñez fue asesinado en su casa de la manzana 16 del barrio de la zona norte de la ciudad. Las pericias genéticas practicadas en la vivienda y el cuerpo de la víctima confirmaron la participación de Franco Jonathan Corvalán quien desde hoy será juzgado por el violento asesinato del enfermero. 
El dolor por la pérdida de un familiar convive con la felicidad por los cortos tiempos que demandó la investigación. Antes dle inicio de la primera audiencia, Marcela, hermana de la víctima, dialogó con LA GACETA y aseguró que “en la familia hay mucha esperanza con el juicio. El fiscal se movió rápido y estamos expectantes por lo que va a pasar. Queremos la pena máxima para el asesino”, aseguró. 
La investigación para determinar quién y cómo mataron a Núñez fue rápida, pero la familia insiste con el entorpecimiento que hubo desde la Subsecretaría de Tránsito y Seguridad Vial de la Municipalidad de Salta. 
Es que, después de asesinar a Leopoldo, Corvalán se llevó algunos objetos de valor: dinero, el celular y el Renault Megane de la víctima. Recuperar el auto sería clave para la investigación ya que quien lo hizo dejaría rastros. Había prisa. La noche misma del asesinato, Corvalán protagonizó un accidente menor en el centro de la ciudad cuando ingresó en contramano a una calle. Descendió del auto, fingió que no tenía la documentación y que vivía cerca. Le pidió al damnificado que lo esperara, que iría a la casa a buscar los papeles, regresaría e intercambiarían los datos. Entonces huyó y dejó abandonado el auto. El vehículo fue secuestrado y trasladado al canchón municipal. Allí permaneció unos días a la intemperie hasta que avisaron a los investigadores que se trataba del auto buscado. 
“Hubo mucha negligencia, el auto tenía pedido de captura y obstaculizaron la investigación”, recordó Marcela. 
El principal sospechoso se había fugado. En noviembre fue detenido en Buenos Aires porque los investigadores rastrearon el celular que era de Núñez y que Corvalán usaba. Luego el joven fue trasladado a Salta. Las pericias genéticas comprometieron su situación y desde entonces permanece detenido. 
¿Quién es Corvalán?
Según los Núñez, “Corvalán era un completo desconocido para la familia, nadie sabía de él”, dijo Marcela. Los trascendidos indicaron durante este tiempo que Corvalán sabía que Leopoldo viajaría a Cancún para pasar unos días de vacaciones. Por esto se acercó a la víctima, intentó ganar su confianza para robarle el dinero que escondía en la casa del grupo 648 de Castañares. 
El caso sacudió al Barrio. Los vecinos aseguraron que la víctima se manejaba con mucha reserva y que se lo veía poco en las calles. “Poly” se desempeñaba como enfermero en la parte de terapia del hospital Materno Infantil, en la capital salteña. 
El pedido de justicia se sintió en las calles del barrio con las marchas convocadas por los familiares desde la escena del crimen hacia Ciudad Judicial. Hoy comenzarán las audiencias y el lunes 24 se conocerá la sentencia. Corvalán se encuentra detenido bajo prisión preventiva desde noviembre. Se le imputa el delito de homicidio calificado criminis causa, es decir que lo acusan de haber matado al enfermero para concretar otro delito, que en este caso fue el robo de sus pertenencias.

Ocho meses pasaron del crimen de Castañares. La noche del 31 de agosto de 2016, Federico Leopoldo  “Poly” Núñez fue asesinado en su casa de la manzana 16 del barrio de la zona norte de la ciudad. Las pericias genéticas practicadas en la vivienda y el cuerpo de la víctima confirmaron la participación de Franco Jonathan Corvalán quien desde hoy será juzgado por el violento asesinato del enfermero. 

El dolor por la pérdida de un familiar convive con la felicidad por los cortos tiempos que demandó la investigación. Antes del inicio de la primera audiencia, Marcela, hermana de la víctima, dialogó con LA GACETA y aseguró que “en la familia hay mucha esperanza con el juicio. El fiscal se movió rápido y estamos expectantes por lo que va a pasar. Queremos la pena máxima para el asesino”, aseguró. 

La investigación para determinar quién y cómo mataron a Núñez fue rápida, pero la familia insiste con el entorpecimiento que hubo desde la Subsecretaría de Tránsito y Seguridad Vial de la Municipalidad de Salta. 

Es que, después de asesinar a Leopoldo, Corvalán se llevó algunos objetos de valor: dinero, el celular y el Renault Megane de la víctima. Recuperar el auto sería clave para la investigación ya que quien lo hizo dejaría rastros. Había prisa. La noche misma del asesinato, Corvalán protagonizó un accidente menor en el centro de la ciudad cuando ingresó en contramano a una calle. Descendió del auto, fingió que no tenía la documentación y que vivía cerca. Le pidió al damnificado que lo esperara, que iría a la casa a buscar los papeles, regresaría e intercambiarían los datos. Entonces huyó y dejó abandonado el auto. El vehículo fue secuestrado y trasladado al canchón municipal. Allí permaneció unos días a la intemperie hasta que avisaron a los investigadores que se trataba del auto buscado. 

“Hubo mucha negligencia, el auto tenía pedido de captura y obstaculizaron la investigación”, recordó Marcela. 

El principal sospechoso se había fugado. En noviembre fue detenido en Buenos Aires porque los investigadores rastrearon el celular que era de Núñez y que Corvalán usaba. Luego el joven fue trasladado a Salta. Las pericias genéticas comprometieron su situación y desde entonces permanece detenido. 

¿Quién es Corvalán?

Según los Núñez, “Corvalán era un completo desconocido para la familia, nadie sabía de él”, dijo Marcela. Los trascendidos indicaron durante este tiempo que Corvalán sabía que Leopoldo viajaría a Cancún para pasar unos días de vacaciones. Por esto se acercó a la víctima, intentó ganar su confianza para robarle el dinero que escondía en la casa del grupo 648 de Castañares. 

El caso sacudió al Barrio. Los vecinos aseguraron que la víctima se manejaba con mucha reserva y que se lo veía poco en las calles. “Poly” se desempeñaba como enfermero en la parte de terapia del hospital Materno Infantil, en la capital salteña. 

El pedido de justicia se sintió en las calles del barrio con las marchas convocadas por los familiares desde la escena del crimen hacia Ciudad Judicial. Hoy comenzarán las audiencias y el lunes 24 se conocerá la sentencia. Corvalán se encuentra detenido bajo prisión preventiva desde noviembre. Se le imputa el delito de homicidio calificado criminis causa, es decir que lo acusan de haber matado al enfermero para concretar otro delito, que en este caso fue el robo de sus pertenencias.

Comentarios