Video: Así trasladaron a Salta al joven que vivía en una jaula

El viernes se conoció la historia de un adolescente de una comunidad originaria de Alto La Sierra que pasa sus días dentro de una jaula desde hace cuatro años. Tiene problemas mentales y sus padres no encontraron otra solución que encerrarlo para que no se escape.

Esta mañana un helicóptero de la provincia junto personal especializado buscaron al menor, quien viajó con su padre hacia la Capital salteña para recibir atención en el Hospital Materno Infantil.

El vuelo llegó a las 14.30 al helipuerto del Hospital Público Materno, en donde se había montado un importante operativo policial. 

El joven llegó junto a su padre y el medico del SAMEC, Cesar Adrián Molina.

Al entrar a la clínica, el padre del joven dijo que viajaron bien y que el joven estaba tranquilo. Al ser consultado por como vivía en Alto la Sierra, el padre aseguró: “él estaba tranquilo”. 

“Vino de muy buen ánimo”, dijo a LA GACETA, José Luis Ángel, responsable de prensa del hospital.  

“Primero van a revisar el estado general del niño. Se le va a hacer una asistencia con varios interconsultores y a partir de eso se va a poder más información”, dijo el comunicador.

Además se informó que se evaluará el estado nutricional del joven y los profesionales se entrevistaran con la familia. 

Por último aclaró que coordinará con el Ministerio de Asuntos Indígenas y con el de Primer Infancia un lugar para alojar a la familia.

En diálogo con la Radio Nacional Salta, el cacique de la comunidad wichí de Alto La Sierra, Ascencio Pérez, explicó que la familia del chico necesita el cercado perimetral del domicilio para evitar que el menor se pierda en el monte.

“El chico no es maltratado por los padre. Lo tienen en la jaulita para que no se escape” dijo el jefe de la comunidad. Además aclaró que el menor se encuentra en buen estado de salud y bien alimentado. 

Pérez contó que todavía no recibieron una respuesta sobre la situación de  otros chicos que padecen algún tipo de discapacidad. 

Es el caso de una nena paralítica cuya silla de ruedas se rompió y su familia no pudo arreglarla por falta de recursos. “Vive con la abuelita y duerme en el suelo”. 

Por último informó que en la Comunidad wichi hay “por lo menos otros tres chicos” con algún tipo de discapacidad