Caso Jimena Salas: esperan poder descifrar el móvil del crimen

El crimen de Jimena Salas, brutalmente asesinada a puñaladas a principio de este año en su casa de Vaqueros, desencadenó una investigación compleja sin grandes avances, una cantidad de hipótesis que no son descartadas y hasta cierta tensión entre la Fiscalía y el viudo que no logra ser autorizado para constituirse como querellante.

Luego de varias presentaciones hechas en nombre del marido de Salas, Nicolás Cajal, el abogado Pedro Arancibia logró un mes atrás reunirse con el procurador general de la provincia, Pablo López Viñals, a quien le realizaron una serie de pedidos para lograr mayor acceso a la investigación. A causa de ese acuerdo, el letrado se reunió en las últimas horas con el fiscal a cargo del caso, Pablo Paz, quien le transmitió las novedades y le entregó una copia digitalizada del expediente.

Frente a tanta incertidumbre y falta de certezas en torno a los autores del crimen, Arancibia le contó a LA GACETA que logró que la Fiscalía le acepte mandar las pruebas recolectadas hasta el momento al perfilador criminal de Buenos Aires que eligieron. “Estas personas se dedican a establecer cuál sería el perfil del delincuente y el móvil del crimen”, explicó. Esto podría aportar información importante que permitiría desechar algunas hipótesis.

Para avanzar en el mismo sentido, el abogado insistió en la importancia de las pericias que se realizan en buenos Aires sobre el teléfono de Salas, que fuera encontrado horas después del crimen, sobre la ruta y casi completamente destruido.

“Estaba en tan mal estado que se requiere de un dispositivo específico que hubo que traer de afuera”, contó Arancibia. Lo que ese celular contenga puede llegar a ser revelador, esperan desde el entorno familiar, tratando de entender qué llevó a los asesinos a robar únicamente ese teléfono, destruirlo de tal forma y haber matado a Jimena con tanta saña. ¿Qué pasó esa mañana del 27 de enero en esa casa? Es la gran pregunta.

Por el momento, Arancibia no fue notificado de la resolución que habría tomado el juez de Garantías, Héctor Martínez, de rechazar la pretensión de Cajal de constituirse como querellante. La decisión del magistrado estaría apoyada en la opinión fiscal de considerar que no puede descartarse a él ni a nadie como responsables materiales o intelectuales del crimen.

Ante esta posibilidad, Arancibia viene trabajando en los fundamentos que utilizará para apelar dicha resolución y sostuvo que bajo ningún aspecto pretende desvincular a Cajal de la investigación, sino que lo único que busca el tener entidad jurídica suficiente para poder participar más activamente de la investigación, representando a víctimas del crimen.