"Sueño con llevar a la Sinfónica de Salta al Teatro Colón"

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Noam Zur, flamante director de la orquesta salteña, cuenta cuáles son sus planes para el organismo.

07 Dic 2017

Esta noche, a las 21.30 y con entrada libre y gratuita, la Orquesta Sinfónica de Salta estrena nuevo director en el Teatro Provincial y la ocasión será además el inicio de un ciclo que abre nuevos horizontes para el organismo. Noam Zur, 36 años, israelí y entusiasmado con el proyecto, está conociendo a los músicos al mismo tiempo que aprende el idioma y los paisajes de la ciudad.

Su proyecto, asegura en diálogo con LA GACETA, es de conseguir en un período de tres años, que la Orquesta Sinfónica sea conocida en escenarios internacionales, hacerla popular y cuenta su sueño mayor: "me gustaría hacer un concierto en el Teatro Colón", dice, sonriente.

Nacido y criado en Israel, con el hebreo como lengua materna y radicado desde 2005 en Alemania, Zur asegura que aprendió el español en cursos online y se desenvuelve sin problemas con pocas palabras, las justas y necesarias para transmitir lo que quiere.

"Siempre busco nuevas ideas, nuevas experiencias, orquestas, personas. Tengo la conexión familiar con Argentina y cuando se abrió la posición de titular me pareció una oportunidad interesante", dice, sobre el deseo que lo trajo a Salta para instalarse como director estable.

Su plan es dirigir el 60% de la temporada del 2018, con una programación que está en pleno armado pero en la que ya incluyó el estreno de la ópera "Tosca" de Giacomo Puccini, un ciclo de sinfonías de Joseph Haydn y la apertura de la temporada con el "Concierto para violín" de Piotr Tchaikovsky.

"Es una muy buena orquesta, muy buenos músicos, simpáticos, agradables, es una orquesta a la que le gusta trabajar y eso no es así en todo el mundo, es algo especial y muy gratificante", dice sobre la experiencia de dirigir a la orquesta salteña, con la que se encontró por primera vez el lunes pasado.

El debut será con un programa que tendrá "Sueño de una noche de verano", de Felix Mendelssohn, la "Obertura Tannhäuser" de Richard Wagner y "Sinfonía del nuevo mundo" de Antonin Dvorák.

"Me gusta mucho los ensayos, la orquesta es como una esponja. De un día al otro cambia y mejora, cambian los sonidos, las frases", agrega el músico. En su curriculum anota la dirección de la Opera y Orquesta Filarmónica de Heidelberg, Alemania; la asistencia como director del Maestro Pierre Boulez y la dirección de la Orquesta del Festival de Lucerna, Suiza.

De 2007 a 2010 fue director Principal en Residencia en el Aalto Teater Essen, Alemania; y de 2011 a 2015, como director Titular de la Kammerphilharmonie Frankfurt, Alemania. A partir de 2015, fue Director Artístico y Titular del Tino Pattiera International Opera Arias Festival, y Director Invitado Principal de la Dubrovnik Symphony Orchestra de Croacia. Su objetivo al frente de la orquesta es, además de girar por la mayor cantidad posible de escenarios dentro y fuera del país, ampliar el conocimiento de estilos posibles para los músicos.

"Tengo una idea larga de tres años, y tengo una planificación en la que me gustaría obtener un determinado resultado. El nivel de la Orquesta es bueno, solo necesitamos obtener una facilidad mayor para la flexibilidad del estilo. Podemos hacerlo con estos músicos, no necesitamos cambiar recursos humanos. Tenemos cargos abiertos y es importante encontrar gente de buen nivel para ocuparlos", concluye.


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