"Gracias a Lucha, el hockey se convirtió en un deporte considerado"

Generosa como compañera y temida como contrincante, sencilla, desinteresada y fundamentalmente una deportista apasionada que hizo lo que quiso con el hockey. Con estas palabras, dos jugadoras y una dirigente de hockey salteñas describieron a la ocho veces elegida como la mejor atleta del planeta y ganadora de dos mundiales, Lucha Aymar. A los 37 años, la rosarina se retiró del hockey tras consagrarse junto a Las Leonas en el Champions Trophy el domingo en Mendoza.

 La salteña Natalia Del Frari, de Popeye, jugó dos temporadas con Las Leonas en 2009 y 2013. En la segunda oportunidad jugó amistosos contra Aymar y también entrenó con ella. "Su habilidad como deportista es increíble, ni una jugadora de 20 años corre como lo hace ella a sus 37", destaca Natalia, quién considera a "Lucha" su ídola.

La jugadora de Popeye coincide con su capitana Mercedes Saavedra al describir el tipo de juego de "La Maga". "Enfrentarla era difícil porque por un lado queríamos prestarle atención a su técnica y por otro intentar que no lo llegue la pelota y evitar que despliegue todas sus habilidades. En la cancha tiene la libertad de resolver la situación que quiera", recuerda Mercedes, quién también vivió la experiencia de enfrentar a ex leona en el campo de juego.

Dos Mundiales, cuatro medallas olímpicas, seis Champions Trophy, tres Juegos Panamericanos, ocho veces mejor jugadora del mundo, Luciana Aymar es la atleta más importante de la historia del deporte. También una de las más queridas. "Cuando estuve en las inferiores de las Leonas entrenábamos con ellas a la mañana y a la tarde, las chicas del interior hacíamos solas las prácticas. Luciana se sumaba a nosotras, nos enseñaba y mostraba habilidades. Fue una muy buena compañera", agrega Del Frari.

"Nunca nadie fue tantas veces elegida como la mejor jugadora del mundo en un deporte amateur como el hockey", sostiene Claudia Catalano, entrenadora y dirigente de Gimnasia y Tiro. "Nadie puede ser la número uno si no lo disfruta y todo lo que Lucha hizo es indiscutible porque fue por amor al hockey", remarcó la ex jugadora, quién además recordó cuando Aymar vino a Salta, en 2000, para participar de un campeonato en Gimnasia y Tiro. "Nadie le pagaba nada y ella estuvo aquí desinteresadamente", sostuvo.