"Macri querrá esa Policía que tira por la espalda, pero nosotros no”, criticó Estela de Carlotto

Luego de lo sucedido en La Rioja con la muerte de un joven tras un abusivo entrenamiento policial y la polémica que se generó con el accionar del policía salteño Luis Chocobar, quien mató al ladrón de un turista estadounidense, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela De Carlotto, comparó la tortura de los cadetes con “los campos de concentración de la dictadura militar” y criticó la postura del gobierno de Mauricio Macri al respecto.

La muerte de Emanuel Garay, de 18 años, "es aberrante y tiene que ser investigado a fondo para llegar a los máximos responsables", dijo De Carlotto en una entrevista a FM La Patriada. Además afirmó que “hay que revisar cómo se forma a los policías”, ya que “el trato de las fuerzas de seguridad siempre fue inhumano cuando formaban a los jóvenes".

“Si formamos a la policía con crueldad responde con crueldad también”, aseguró.

Aprovechó también para criticar la postura del Gobierno nacional respecto al caso del policía Chocobar. "Macri querrá esa Policía que tira por la espalda, pero nosotros no. No por ser delincuente el chico tenía que morir", aseveró.

“Lo que quieren es que la policía pueda hacer lo que le parezca”, criticó y apuntó contra la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien apoyó a Chocobar: “la ministra está cometiendo unos disparates tremendos”, sostuvo.

“Este Gobierno nos está defraudando día por día. Nos está preocupando muchísimo de todo lo que está pasando y llevando a la miseria al país. Porque aparte de esta tortura visible, hay otra tortura cotidiana que es perder empleos, que no hay paritarias, que los docentes no saben si empiezan las clases. Todo esto es tener un país en ascuas, mientras ellos descansan”, disparó la titular de Abuelas, recordando que Macri lleva 29 días de descanso en tan solo dos meses.

Al felicitar a Chocobar en la Casa Rosada, De Carlotto entendió que el Gobierno de Macri está abriendo la puerta para la violencia institucional.

“Nosotras, las abuelas, encontramos vida y nunca el presidente se dignó a decir ‘señoras qué bien’; no nos recibió, no nos quiso recibir, se negó, decía que no tenía tiempo. Y luego tardíamente nos recibió en una reunión que no tuvo resultados… O sea que está levantando lo irregular, lo delictivo, para imponer la fuerza de los uniformados como que son dueños de hacer lo que quieren”, lamentó.