Bailando y cantando partieron anoche desde Cobos con dirección a Salta los peregrinos de Rosario de la Frontera.
A pesar de caminar más de 180km, de día y noche con temperaturas que rondan los 29ºC pasaron cantando una canción bastante singular: "Peregrino, peregrino, qué cansado se te ve, no me importan las ampollas, al Milagro llegaré".