En la tarde de ayer, bici policías circulaban por San Lorenzo cuando escucharon pedidos de auxilio. Un bebé de cinco meses se había ahogado con un trozo de galleta y se estaba asfixiando.
Sin dudarlo, los efectivos le practicaron los primeros auxilios y realizaron distintas técnicas para que expulsara el alimento que obstruía las vías respiratorias.
Afortunadamente el pequeño mejoró y fue trasladado hasta un centro de salud lugar para ser revisado.