Llega agosto y los salteños se preparan para celebrar una de las fiestas más ancestrales del noroeste del país. En cada localidad, en lugares públicos y hasta en los hogares, se rinde culto a la Pachamama o Madre Tierra.

Por su protección, fecundidad y fertilidad, las comunidades agradecen esta ayuda realizando una ofrenda.

En esta tradicional fiesta, los oferentes vuelcan dentro de la boca de la Madre Tierra distintos tipos de bebidas y alimentos regionales, como chicha, vino, licores, locro, maíz, hojas de coca y tabaco.

La ceremonia central se realizará el sábado en San Antonio de los Cobres y durante todo el mes continuarán las festividades en distintos municipios, culminando el 31 de agosto en Tolar Grande.

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