Esta mañana vecinos de Parque La Vega encontraron un cuerpo sin vida en un basural, en una zona de departamentos abandonados. Fuentes judiciales informaron que no había ninguna documentación y que el cadáver estaba en avanzado estado de descomposición.
A la tarde, una mujer, madre de un joven desaparecido en la zona el 30 de octubre, realizó una identificación: dijo que el muerto era su hijo. Lo hizo tras participar de un reconocimiento en la morgue judicial.
No obstante, la fiscalía a cargo dispuso la realización de un cotejo genético a fin de dejar establecido el parentesco.
La medida se lleva adelante como parte del protocolo establecido para este tipo de casos, en los cuales se toman muestras del familiar y se cotejan con el ADN extraído del cadáver. Hasta tanto se realice esta medida a cargo de peritos del Cuerpo de Investigaciones Fiscales, la Fiscalía decidió mantener en reserva la identidad de la mujer.
Desde fiscalía dieron a conocer que los primeros resultados de la autopsia se sabrán mañana. Con estos datos se podrá establecer la data de muerte y una posible causa.