Por ciertas muertes covid-19, la Justicia investigará si hubo abandono de persona

El fiscal penal Ramiro Ramos Ossorio inició actuaciones de oficio, con el fin de esclarecer las circunstancias en las que murieron los pacientes Eduardo Chañe, Gabriel Alejandro Paz, Juan Alberto Agüero y Luis Mendoza, quienes rogaron y peregrinaron por atención médica antes de sus decesos.

Se solicitó informes al Sistema de Emergencias 911 para verificar si se realizaron llamados para solicitar asistencia; cuántos se efectuaron en cada caso y qué respuestas se dieron.

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También se pidió detalles al Comité Operativo de Emergencias (COE) y a la Central de Operaciones Control y Seguimiento Covid-19 (COCS Covid-19) del Gobierno de Salta, que centralizan las distintas unidades de mando y comando de las operaciones de emergencia frente al coronavirus, y coordinan las acciones con el sistema público y privado de salud, Ministerio de Salud Pública, organismos nacionales, provinciales, municipales y otros.

Además, el fiscal requirió registros de verificaciones que se hicieron desde el SAMEC-Ministerio de Salud, con concurrencia o no a los domicilios de los pacientes; y a las instituciones sanitarias y organismos de salud, acerca de los pedidos de asistencia y tratamientos médicos dispensados. En el caso de Chañe, también se solicitó la historia clínica al Instituto Médico de Alta Complejidad (IMAC).

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Desde esta clínica, el presidente Luis Fernando Saavedra salió a responder al Procurador General de la Provincia, Abel Cornejo, ante el requerimiento de esta investigación, y lo hizo público en las redes sociales.

Saavedra asegura en su comunicado que el paciente fue asistido mientras estuvo provisoriamente en la Guardia de la clínica, a pedido de la presidenta del Instituto Provincial de Salud (IPS), Glays Sanchez, quien le habría comentado al médico que Chañe “hacía ya un tiempo transitaba en una ambulancia” y necesitaba derivarlo.

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Desde el Imac le habrían informado al IPS que no contaban con cama disponible en ninguna de sus unidades, pero “con criterio humanitario” se recibió al paciente en una sala de aislamiento para covid-19, hasta tanto la obra social consiga dónde internarlo. Asegura Saavedra que estuvo allí “5 horas”, asistido profesionalmente y estable, hasta que lo derivaron al hospital San Bernardo, donde fue internado y murió a los tres días. Niega el “abandono” y asegura que todo está registrado y a disposición del fiscal.