La hermana del femicida brindó detalles escalofriantes del asesinato

Brisa Goytea una joven de 15 años fue estrangulada por Claudio Víctor Segundo en su casa del barrio Pablo Saravia, el 6 de diciembre del año pasado. Ana la hermana menor de Claudio dio aviso a la Policía y pidió ayuda por Facebook.

Brisa había concurrido con una gaseosa a la casa de su novio para almorzar.  La muchacha mantenía un historial de violencia de género. Incluso, de las pesquisas judiciales se verificó que efectivamente se habían dispuestos medidas de carácter restrictivo en contra de Segundo, aunque el día del crimen, la joven aceptó ir a la casa de su novio, donde surgió una fuerte pelea de pareja.

Según lo investigado por la Fiscalía, el joven llevó a su novia hasta la habitación de la casa. Allí discutieron porque Segundo suponía que la víctima lo iba dejar. Esto desató la reacción del homicida, quien estranguló a Brisa. 

Ana, la adolescente de 13 años, hermana del acusado, estaba en una habitación contigua y escuchó los jadeos de Brisa cuando era estrangulada. Se acercó hasta la puerta del dormitorio y vio a su hermano encima de la víctima mientras la ahorcaba con un cinto. 

En esos instantes, Ana corrió hasta el vecino de enfrente y le avisó lo que sucedía. “Don Carlos llame al 911 que Claudio la está ahorcando a Brisa”, declaró Ana, según la Fiscalía. Luego, la jovencita regresó a la casa para saber si la víctima había sobrevivido.

Esperó hasta que su hermano se retirara de la habitación, ingresó y encontró a Brisa envuelta en una bolsa de plástico debajo de la cama. Lejos de entrar en shock regresó a su cuarto y con su celular se conectó por la red social Facebook con una amiga de la misma edad.

Le contó lo que había pasado; incluso que salió y pidió ayuda a gritos a los vecinos, pero cuando llegó un patrullero policial, Segundo la amenazó para que no diga nada, sino iba a hacerle daño a su padre. Para sacarse a la Policía de encima, el muchacho le dijo que había discutido y que se había ido al almacén.

Después que el móvil policial se fue, Ana, comenzó a chatear con su amiga sobre lo sucedido, pidiéndole que alertara a la Policía, ya que tenía miedo por ella, pues su hermano estaba alterado. A los pocos minutos, y tras alertar al 911, la amiga junto a su madre se hicieron presentes en la casa del asesino.

Tras golpear las manos, Segundo salió y la madre de la amiga le informó que las nenas, que son compañeras, debían hacer una tarea juntas, por lo que la iba a llevar hasta su casa. El asesino dejó ir a su hermana, mientras seguía excavando una fosa para enterrar el cuerpo de su novia.

La madre y las dos compañeritas se dirigieron directamente a la dependencia policial donde informaron todo lo ocurrido. A los pocos minutos, otro patrullero llegó y detuvo a Segundo, quien en su defensa intentó sostener que había matado a Brisa porque ésta se lo pidió.

En vista de estos elementos probatorios, el Fiscal solicitó en su requerimiento de juicio que Segundo sea juzgado por el delito de homicidio calificado por la relación de pareja, agravado por la ley de violencia de género, acusación que contempla la pena de prisión perpetua.

“La violencia y premeditación de Segundo en el hecho está comprobada no sólo por la brutalidad utilizada al asesinarla, sino también por testimonios de amigos que escucharon al acusado cuando dijo que iba a matar a Brisa, aunque no lo denunciaron en su momento”, explicó el fiscal, Pablo Rivero, de la Unidad de Grave Atentados contra las Personas.