La nota publicada en la edición de ayer de Leila Argañaraz -la tucumana que se desempeña como referí en el torneo Federal B y se prepara para obtener la licencia nacional- despertó inquietud respecto del uso del femenino del sustantivo “árbitro”.
En efecto, de acuerdo al Diccionario Panhispanico de Dudas, de la Real Academia Española, resulta incorrecto utilizar el masculino para referirse a una mujer que realice esta actividad.
“‘Persona encargada de decidir y solucionar un conflicto entre distintas partes’ y ‘profesional que vela por el cumplimiento del reglamento en un encuentro deportivo’”, sostiene la definición de la Real Academia Española (RAE).
Luego agrega: “El femenino es árbitra (...). No debe emplearse la forma masculina para referirse a una mujer”, dice el sitio de la máxima autoridad de la lengua española (www.rae.es).
Por lo tanto, Leila -y toda mujer que cumpla sus mismas tareas- es “árbitra” de fútbol (y esto vale para cualquier otra disciplina deportiva).