A Sabrina Berton le apuntaron a la cabeza, según el CIF

La espera se hizo larga, pero finalmente el 3 agosto comenzará el juicio por la muerte de Sabrina Berton, la joven que murió de un balazo en la cabeza el 14 de marzo de 2008, cuando se dirigía a la cancha de Gimnasia y Tiro para ver el clásico ante su querido Central Norte.

Siete años y medio después de haber perdido a su hija, Roxana Belbruno, continúa su lucha incansable, ahora con un objetivo claro: que la imputación por la que se elevó a juicio sea modificada de homicidio culposo a homicidio simple.

“Recién este año se hizo el barrido electrónico del CIF en la ropa de mi hija y demostró que había rastros de pólvora, con lo cual el disparo fue entre 1 y 1.5 metros de distancia, que le destruyó el cerebro”, contó Roxana a LA GACETA para explicar por qué considera que no pudo haber sido por negligencia o descuido.

Aquel 14 de marzo de 2008, un grupo de amigos hinchas de Central Norte caminaban por la calle Belgrano con destino a la cancha de Gimnasia y Tiro, cuando un disparo terminó con la vida de Sabrina Berton en la esquina de la calle 25 de mayo. Si bien fue atendida inmediatamente en el sanatorio El Carmen -que se encuentra al frente del lugar del hecho- nada pudo evitar el fatal desenlace.

Según relató la madre de la víctima, el inicio de la investigación de la fiscal María Inés Loyola caratulaba al hecho como homicidio simple, pero al poco tiempo pasó a homicidio culposo (sin intención), se liberó a los imputados y el fiscal Eduardo Barrionuevo requirió juicio con esa imputación. “Con estas pruebas hay un hecho nuevo y por eso en el juicio buscaremos que vuelva a homicidio simple, ya que el modo no es accidental”, reclamó.

En estos años pasó de todo en esta causa. Desde conocer el mundo de las barras bravas, porque en el hecho se involucró a “la Banda del Camión” -conocida facción de la hinchada de Central Norte-,  hasta casi la prescripción de la causa en 2013.

El juicio se acerca

En la causa está procesada Aldana Alejandra Leyseca como presunta autora responsable de homicidio culposo, Juan Ignacio Córdoba como probable autor responsable del delito de portación de arma de fuego y Nicolás Gonzalo Valdez como presunto autor responsable del delito de encubrimiento agravado.

“Hay más de 80 testigos, tengo expectativas en lo que van a declarar los que yo aporté pero hay muchos que fueron cambiando porque tienen mucho para perder, también hay un código o pacto entre barras, todos niegan que haya habido un arma”, dijo Roxana.

El mensaje que hizo aparecer el arma

El arma con la que se disparó no apreció esa noche. Dos meses después del hecho, un mensaje anónimo en el metroflog de Sabrina indicó que la tenía la policía pero por otro hecho y que no sabían. “Fue por algo que paso al día siguiente de lo de Sabrina, un asalto a un remisero que cayó en el mismo juzgado”, contó Belbruno.

“Para mí esto fue algo personal entre mi hija y Aldana”

La ansiedad por el juicio es difícil de contener para Roxana, quien no cree que haya sido un problema de barras, porque conoce a la mayoría de los imputados ya que eran amigos de su hija del barrio El Carmen. “No me dio miedo enfrentarme a la Banda del Camión... yo nunca recibí amenazas de ninguna clase”, reveló.

“Era la primera vez que Sabrina iba a una cancha de futbol, yo la llevé a donde se juntaba con sus amigos, era mi única hija, jamás imagine que podía pasar lo que pasó”, concluyó emocionada.